Durante la etapa escolar tus hijos se encuentran en constante crecimiento, pero también están expuestos a virus y bacterias del ambiente que pueden ser perjudiciales para su salud; sin embargo, ¿sabías que existe un nutriente que lo ayuda a crecer fuerte y sano?
Según la licenciada en Nutrición y Dietética de la Clínica Vascusalud, Karol Orellana, las proteínas son la base de la construcción de los tejidos del cuerpo humano y se encuentran, principalmente, en las carnes de origen animal: pollo, pescado, huevo y mariscos.
“Las proteínas también se encargan de construir la función inmune en los pequeños, la cual los ayuda a prevenir enfermedades, tener buena hemoglobina y glóbulos blancos para que siempre estén sanitos”, enfatiza.
Pero ¿qué pasa si tu pequeño no consume este esencial nutriente? Según Orellana, el crecimiento se verá estancado y se enfermará constantemente de infecciones y gripe.
La experta señala que según la edad de tu hijo, el requerimiento proteico es distinto. A continuación un ejemplo de la cantidad de proteína que debería consumir tu hijo pequeño y adolescente:
Desayuno: Un huevo
Almuerzo: Filete de pollo o pescado de 50 gramos
Cena: Trocitos de polloAdolescente
Desayuno: Dos huevos
Almuerzo: Filete de pollo o pescado de 100 gramos
Cena: Filete de 50 gramos
Si a tu hijo le cuesta consumir carnes, puedes optar por la proteína de origen vegetal, que son las menestras. Ofrécele lentejas, arroz y ensalada para cubrir sus nutrientes.
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