Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un tiradito de pescado al olivo y una jalea de mariscos con salsa criolla, yuquitas y una chicha morada fresquecita. “María, muchos colegios particulares están de vacaciones una semana, así que los padres deben aprovechar para estar un poco más con sus hijos, hacer actividades juntos y reforzar la comunicación.
Eso es imprescindible en estos tiempos en que cada vez más muchachos tienen una exagerada necesidad de estar frente al televisor, la Laptop, Tablet o el Smartphone. Si se quedan sin estos dispositivos, muchos se alteran, la pasan mal. Por eso, los expertos dan algunos consejos para alejarlos de estos equipos:
Dales el ejemplo: Los padres no pueden estar prendidos de la TV y otros dispositivos, y luego pedir a sus hijos que no hagan lo mismo. En casa, estos dispositivos tecnológicos deberían estar desconectados.
Otras alternativas: Hay que incentivarlos a la lectura, los deportes, dar un paseo, conversar con otras personas.
Un solo televisor: Los niños no deben tener TV en su cuarto, pues no deben pasar más de una hora al día frente a la pantalla.
Como premio. Los hijos no tienen por qué usar siempre los Smartphones, TV, Tablets y otros. Se les debe permitir emplearlos por tiempo limitado solo si cumplen sus obligaciones.
Rutinas: Los niños deben seguir una rutina de lunes a viernes y otra los fines de semana. En ambas, la familia completa debe participar.
Más control: Los padres tienen la obligación de vigilar personalmente, siempre, lo que sus hijos hacen en Internet. Esa tarea no debe hacerla otra persona.
Bloquear contenidos: Violentos y para adultos en todos los dispositivos del hogar con acceso a Internet.
Para pasar más tiempo de calidad con tus hijos:
Pregúntales: No adivines ni esperes siempre que tus hijos te digan lo que es divertido para ellos. Pregúntales qué les gustaría hacer a tu lado.
Pasa tiempo a solas: Con cada uno de tus hijos. Así aumentarás su autoestima y mejorará su sensación de unión contigo. Puede ser solo ir de compras juntos, pasear al perro, mientras los otros se quedan con su padre.
Haz que participen: De tu vida profesional y social. Puedes llevarlos a tu oficina o a tomar café con tus amigas, así conocerán tus otras facetas.
Habla con ellos: Cada vez que puedas y diles que los amas. Que sepan que los apoyas. Se sentirán queridos y comprendidos.
Gary tiene razón. Me voy, cuídense.