La presencia de sangre en la orina se denomina hematuria y es un signo que no puede pasarse por alto. Esta probable infección alertaría la presencia de piedras en los riñones, neoplasias urológicas y hasta una tuberculosis urogenital. La cantidad puede ser muy pequeña o detectarse sólo con exámenes o bajo un microscopio.
Luis Miguel Peralta, urólogo de la Clínica Ricardo Palma, explica que la hematuria macroscópica es la coloración rosada o roja de la orina con o sin coágulos debido a la presencia de glóbulos rojos. Muchas veces desaparece sola; sin embargo, es importante que, se visite a un especialista, a fin de identificar su origen y comenzar el tratamiento adecuado para cada caso.
“Siempre debe ser estudiada; ya que puede ser síntoma de una enfermedad más grave. En ocasiones la expulsión de orina puede resultar dolorosa y un diagnostico precoz es la clave para poder prevenir otras anomalías”, señala.
Causas
La prevalencia de esta afección está relacionada a los factores de riesgo de cada persona. Entre ellas, infección en la vejiga, los riñones, la próstata o la uretra, procedimientos reciente en las vías urinarias, como cateterismo, circuncisión, cirugías o biopsias.
De igual forma, en las mujeres con la menstruación o la ingesta de algunos alimentos como betarragas, fresas o zanahorias que tiñe la orina o el uso de antibióticos; o de medicamentos antinflamatorios que pueden alterar su color temporalmente sin mayor trascendencia.
Si no hay ningún problema estructural o anatómico con los riñones, las vías urinarias, la próstata o los genitales, las causas podrían ser trastornos hemorrágicos (como la hemofilia), coágulo de sangre en los riñones, medicinas anticoagulantes (ácido acetilsalicílico (aspirin) o warfarina).
Tenga en cuenta
La infección urinaria tiene como desencadenantes malos hábitos higiénicos, retención urinaria o consumo de pocos líquidos; mientras que la litiasis urinaria el consumo excesivo de carnes.