Enfrentar una entrevista de trabajo debe ser una de las pocas experiencias por las que todos –casi sin excepción– debemos haber pasado como parte de nuestra etapa laboral, y también es casi seguro que como parte de todo proceso de selección de personal hemos pasado por pruebas psicológicas.
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Y es que las pruebas psicológicas, psicotécnicas o psicométricas son evaluaciones que sirven –como señalan en LHH Perú– para “complementar e interpretar las pruebas cuantitativas y para ayudar a los entrevistadores a evaluar que el candidato encaje con el perfil buscado en el puesto”, por lo que también “permiten reconocer la intención de la persona de dar una imagen exageradamente positiva de sí mismo”.
En ese sentido, según refieren en Michael Page, este tipo de pruebas “van más allá del currículum estático y retrospectivo como documento que muestra la idoneidad del candidato potencial”, por lo que sirven para evaluar las habilidades interpersonales y la compatibilidad entre empresa y empleado.
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Tomando en cuenta el objetivo de persiguen, entre las pruebas psicológicas más usadas por los reclutadores destacan:
Es una prueba que muestra una descripción completa de la personalidad de una persona, debido a que predice ciertas conductas, en situaciones normales o bajo presión. Se dice que en un proceso de selección de personal, describe la reacción del candidato ante una situación estresante y la forma en que desarrolla el trabajo en esa condición.
Esta prueba busca identificar información sobre la personalidad del postulante y algunas competencias relacionadas a su capacidad de resolver problemas de organización, creatividad, manejo de relaciones interpersonales, entre otros.
También se usa para descartar algunos problemas de personalidad como paranoide o esquizoide.
Para realizarlo, se entrega una hoja con ocho cuadros en blanco, con unas pequeñas formas; el postulante lo debe completar con el dibujo que imagine y después colocarle un número por orden y un título.
Según Te Recluta, el principal objetivo de esta prueba es “evaluar las formas en las que una persona se comporta en una determinada situación en la que se demanda control y supervisión del personal a cargo”.
En ese sentido, sirve para detectar hasta qué grado una persona tiene habilidad para manejar las relaciones interpersonales.
Es una prueba de 30 preguntas y situaciones.
Es una de las pruebas más conocidas y busca identificar algunas características de la personalidad del candidato a través de la técnica del dibujo realizado y de la imagen corporal del individuo bajo condiciones ambientales desagradables o tensas, en las que la lluvia representa el elemento perturbador.
Conocida también como D48, esta prueba busca medir la inteligencia G o inteligencia general, que está relacionada con las capacidades lógicas del individuo.
Es una prueba de inteligencia no verbal y sirve para descubrir la capacidad del postulante de elaborar conceptos y aplicar el razonamiento sistemático a nuevos problemas.
Se basa en encontrar la ficha que continúa la serie que se propone en cada pregunta.
Llamada también prueba de los colores, es de tipo proyectivo y busca conocer la personalidad del postulante a través de la elección de un color (azul, verde, rojo, amarillo, violeta, marrón, negro y gris), que servirá para conocer el tipo de personalidad del postulante o cómo se afronta al estrés.
El también llamado test de la figura humana, es una prueba que en consiste dibujar a una persona en una hoja en blanco. Es otra prueba proyectiva que sirve para evaluar características de la personalidad, ambiente, habilidades, sexualidad.
Elaborado por Raymon Cattell en 1943, el Cuestionario Factorial de Personalidad 16PF identifica 16 rasgos o categorías de personalidad que tenemos en diferentes proporciones (afabilidad, razonamiento, estabilidad, dominancia, animación, atención a las normas, atrevimiento, sensibilidad, vigilancia, abstracción, privacidad, aprensión, apertura al cambio, autosuficiencia, perfeccionismo, tensión).
Este test tiene 170 preguntas y determina cómo respondemos a situaciones laborales. Es muy conveniente cuando los procesos de selección son para altos y medios mandos.
El Cuestionario de Personalidad Ocupacional (OPQ) muestra cómo los aspectos o rasgos de comportamiento de un individuo afectarán su desempeño laboral. Tiene 104 preguntas, mide 32 características y se basa en escoger las opciones más y menos parecidas a la personalidad del postulante.
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