“Amor, no quise golpearte, es que tú me hiciste renegar”, “se me pasó la mano, no quise hacerlo, yo te amo, no volverá a suceder”, son excusas de un hombre violento después de golpearte. Y aunque una parte de ti quiere creer que nunca más lo hará... es falso. Volverá a hacerlo repetidas veces, o hasta que tú decidas salvar tu vida, denunciarlo y huir de ese infierno.
“Un hombre violento no te golpea a la primera, empieza con faltas de respeto, celos enfermizos, humillaciones. Esas deberían ser tus señales de alerta para replantear tu relación porque estás al lado de un potencial golpeador”, comenta la psicóloga Lizbeth Cueva.
La experta en terapia de pareja enfatiza en no creer en justificaciones, mucho menos en el ‘no volveré a golpearte’ porque sí lo hará.
“Si no recibe terapia psicológica, no va a cambiar. El cambio empieza por uno mismo, cuando lo haces a conciencia, no para salvar la relación. Esa primera cachetada, patada o puñete es solo el principio”, indica.
No justifiques la violencia. No importa cuán enamorada estás o cuánto quieres creer en que ‘se le pasó la mano’ y está arrepentido, porque es mentira. Valora tu vida.
“Muchas normalizan el maltrato porque han vivido una infancia con violencia, y dependen económica y emocionalmente del hombre”, agrega Cueva.
Los hombres violentos requieren terapia psicológica obligatoria para dejar de ser agresivos, porque necesitan reconstruir los valores y creencias aprendidas desde la infancia.
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