Se confirmó que los hermanos Lenin Alexander (40) y Claudia Rocío (44) Benites Aguirre son los autores del atentado en la clínica Ricardo Palma de San Isidro, donde hicieron estallar dos mochilas con explosivos que dejaron 20 heridos. El caso causó conmoción y dio la vuelta al mundo.
Lenin Benites Aguirre es contador y Claudia, odontóloga. Ambos estaban de novios con sus respectivas parejas y ella se iba a casar, cuando su madre falleció.
El infausto hecho turbó sus mentes y entonces empezó su calvario. Su hermano mayor, Percy Iván, contó que su progenitora, Victoria Aguirre Oviedo, fue internada en dicha clínica para ser operada de un aneurisma en el cerebro.
“El 24 de agosto del 2011 operan a mi madre, ella ingresó caminando, y salió cuadripléjica el 12 de febrero del 2012. Mi batalla legal comienza el mismo 24 de agosto, con una investigación policial, y después va a lo penal y a Indecopi, que multa a la clínica con 96 UIT”, sostuvo visiblemente afectado.
QUEMADURAS
Al salir, dijo que Lenin Benites Aguirre sigue inconsciente, en la Unidad de Cuidados Intensivos, y tiene graves quemaduras, mientras que Claudia Benites Aguirre se encuentra estable, en la misma área. “Que la fiscalía los investigue. Solo espero que mis hermanos salgan de esto y se restablezcan. Mis hermanos me han decepcionado, no justifico nada. Estos tíos (sus hermanos) han sido ‘detonados’ por la clínica Ricardo Palma, por la negligencia que cometieron con mi madre”, expresó.
Lenin y Claudia Benites Aguirre recibían atención psicológica y psiquiátrica, pues estaban muy afectados. Ella tenía seguro médico, tomaba ansiolíticos y se atendía en la posta médica. Él iba esporádicamente a una consulta porque no contaba con seguro.
VACIARON PÓLVORA DE 21 'RATAS BLANCAS'
El general PNP Gastón Rodríguez indicó que se logró identificar a los autores de las explosiones por las huellas dactilares. “Al tener las identidades se supo que ambos registraban antecedentes en la clínica. Han utilizado pólvora confinada”, sostuvo.
En la casa de los hermanos se encontraron 21 cartuchos de ‘ratablanca’ vacíos, lo que indica que ellos utilizaron la pólvora para hacer una ‘bomba casera’.