¡De mostrando su poderío! Fue hace un mes que el secretario de Estado norteamericano Rex Tillerson había manifestado que "La política de paciencia estratégica ha terminado". Estas palabras abrieron las posibilidades de un futuro ataque hacia Corea del Norte.
Donald Trump también se pronunció vía Twitter sobre la relación de Corea del Norte. Trump manifestó que el gobierno de Kim Jong estaba “comportándose muy mal" y que había estado "jugando con Estados Unidos durante largo tiempo"
Por su parte, Rex Tillerson solo emitió un corto y contunden comunicado sobre el lanzamiento de misiles norcoreanos: "Estados Unidos ya había hablado bastante sobre Corea del Norte". Tras estas palabras, La Casa Blanca decidió enviar una flota buques hacia la península de Corea.
Medida prudente. Según The Guardian, Dave Benham, portavoz militar, manifestó que "el mando del Pacífico de EEUU ordenó al grupo aeronaval del portaaviones USS Carl Vinson movilizarse como medida prudente para mantener su disposición y presencia en el Pacífico".
Benham también manifestó que "la principal amenaza en la región" es Corea del Norte porque su "irresponsable y desestabilizador programa de pruebas de misiles y su búsqueda del arma nuclear".