Una intervención de la Policía y Fiscalía en negocios ubicados en los alrededores del principal mercado de la ciudad de Chiclayo permitió descubrir miles de cigarrillos ilegales.
Personal de la PNP, en coordinación con la Fiscalía de Prevención del Delito y con apoyo de personal de Seguridad Ciudadana del Municipio de Chiclayo, ejecutaron el operativo tras tener conocimiento que se comercializaban cigarrillos paraguayos que ingresaron ilegalmente al país.
Fue así que intervinieron el Stand 149, ubicado entre las calles Cuglievan y Arica, a pocos metros del Mercado Modelo. Allí se descubrió la mercadería ilícita que se encontraba camuflada en cajas de cartón pertenecientes a otro tipo de productos.
Durante la intervención, la encargada del negocio no contaba con documentación de la legal procedencia de los productos, por lo que se procedió a su incautación.
Asimismo, las autoridades incautaron miles de cigarrillos ilícitos en el negocio de otra mujer. En ambos casos se trata de productos falsificados que Ingresaron ilegalmente al país por la frontera con Bolivia. Además, se informó que el 86% de cigarrillos ilegales que ingresan al país son de fabricación paraguaya.
De igual forma, las autoridades comentaron que un estudio de laboratorio realizado a cuatro marcas de cigarrillos falsificados se hallaron materiales como caparazones de insectos y trozos de madera de hasta dos centímetros de longitud, los cuales son completamente ajenos a los de un cigarrillo regular.
Un vendedor ambulante prefirió abandonar su mercadería antes que responder ante la Policía por la venta de miles de cigarrillos de contrabando en una de las principales calles de Morropón, en Piura.
Agentes de la Policía Nacional, en coordinación con un representante del Ministerio Público, ejecutaron un operativo en diversas zonas de la ciudad donde se tenía información de la venta de cigarrillos de fabricación paraguaya y que ingresaron ilegalmente al país por la frontera con Bolivia.
Fue así que llegaron al cruce de los jirones Adrianzén y Dos de Mayo, donde Gaspar Sullón tenía su puesto ambulante.
Al percatarse de la presencia de las autoridades, el comerciante decidió darse a la fuga abandonando los productos ilegales que fueron incautados por las autoridades.
Asimismo, los agentes del orden llegaron a la tienda “Huamán” y al negocio “Barreco”, en los cuales también encontraron cigarrillos adulterados que fueron decomisados para su posterior destrucción.
De igual manera, las autoridades señalaron que en algunos estudios de laboratorio llevados a cabo en cuatro marcas de cigarrillos falsificados se hallaron materiales como caparazones de insectos y trozos de madera de hasta dos centímetros de longitud, los cuales son completamente ajenos a los de un cigarrillo regular.
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