Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por unas cachemas fritas con arrocito graneado, papas doradas, ensalada de tomate y cebollas con bastante juguito de limón y, para tomar, un refresco de maracuyá friecito. “María, el escándalo provocado por el supuesto influencer ha puesto la atención sobre un problema que lleva años, no solo en el Perú, sino también en el mundo. Se trata del consumo de internet y el uso de las que hacen los más jóvenes, nuestros hijos.

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El tal ‘Makanaky’, en entrevista con el exboxeador Jonathan Maicelo, confesó que participó en la violación sexual de una menor de edad hace años. Lo dijo riéndose, como si fuera una palomillada. Se trata de un delito gravísimo y abominable que merece varios años de prisión. Ya comenzaron a investigarlo. Pero su caso sirvió para poner la atención sobre otros sujetos, más o menos populares, que utilizan las redes y hasta hacen presentaciones en vivo, donde se mofan de la desgracia de otros, hacen escarnio de las personas que son diferentes. Van dejando mensajes de odio disfrazados de bromas. Y muchos chicos pagan por verlos y les celebran las tonterías que dicen.

Están normalizando conductas muchas veces violentas ante personas jóvenes sin el criterio suficiente para diferenciar lo bueno de lo malo. Eso ocurre porque hoy los chicos se pasan varias hora al día viendo cualquier cosa en redes, en lugar de leer un libro, de cultivarse.

Ante este panorama, los padres tenemos bastante responsabilidad. Por eso, si tienes hijos:

  • Conversa con ellos. Según su edad, puedes tocar todos los temas. Una forma práctica de hacerlo es ver juntos un programa, un noticiero, y pedirles su opinión. Hay que escuchar con respeto lo que digan, así nos alarme. Luego, con mucho tacto, y exponiendo razones, los padres deben dar su punto de vista. Sin burlarse de lo que expresen los chicos.
  • Fomenta la lectura. No solo les compres libros e insistas en que lean. Siéntate tú mismo a leer para que te vean e imiten tu ejemplo. Luego pueden comentar la lectura, sobre los personajes, situaciones. Eso les dará una nueva perspectiva de la lectura y estrechará los lazos de padres e hijos.
  • Controla su tiempo ante las pantallas electrónicas. Estas son la computadora, el televisor, celular, videojuegos, tablet y otros. Si van a jugar con las pantallas, dales un tiempo, puede ser media hora, y que lo respeten. Elige juegos de estrategia para ellos y desecha los de violencia.
  • Haz que tus hijos hagan otras actividades. Además de estudiar y de jugar con el celular, que colaboren con las tareas del hogar, que hagan deporte, que conversen personalmente con otras personas. Si tienen abuelos, que los visiten”. Gary tiene razón. Me voy. Cuídense.

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