Los familiares de los tripulantes del pesquero español Villa de Pitanxo viven los momentos más angustiantes de sus vidas: aún no tienen noticias sobre el rescate del barco que naufragó en aguas canadienses la madrugada de este martes, mientras realizaban su faena.
Uno de los marineros desaparecidos es el peruano Jonathan Calderón, de 39 años, quien trabajó casi toda su vida en este navío. Desde Pontevedra, en Galicia, su tía Elizabeth llegó muy preocupada hasta la armadora Nores en Marín para tener información del paradero de su sobrino, señaló La Voz de Galicia.
“Esto es una tragedia, está mi sobrino que tiene dos hijos de 14 y 10 años, no sabemos nada, solo nos queda rezar”, señaló entre lágrimas. “Desde que llegó a España está trabajando en los barcos. Este pesquero (Villa de Pitanxo) ha sido su barco de toda la vida”.
La esposa de Jonathan estaba a punto de abordar un vuelo por vacaciones, pero Elizabeth hizo que la llamaran y tuvo que volver del aeropuerto.
“Recibí la llamada de una amiga que había escuchado información y vine a averiguar. El barco partió desde hace más de un mes”, continuó.
“Ellos son vecinos de Marín. Su esposa estaba por viajar al extranjero, pero le avisaron y la están trayendo del aeropuerto. La familia (en Perú) aún no sabe nada, imagínate cuando se enteren”.
El dolor que deja la noticia del naufragio también llegó a la familia de William Arévalo Pérez, otro marinero peruano de 37 años quien tiene dos hijos de 11 y 4 años.
Su tío Carlos Ordóñez señaló a la prensa local que en su familia “estamos muy agobiados, no sabemos si están vivos o muertos”. William es compañero de Jonathan.
“Llevamos toda la vida en Marín, hace 21 años que llegamos de Perú y desde que William empezó a trabajar, va al mar”, lamentó Ordóñez, quien se enteró de la noticia esta mañana cuando acompañaba a un familiar al centro de salud.
Ordóñez, también pesquero, forma parte de la tripulación del Nuevo Morriña, pero su faena casi siempre la realiza en el caldero de Irlanda. “Uno de mis compañeros tiene al hijo en el Villa de Pitanxo y él está en alta mar. No sabe nada. He hablado con nuestra armadora para que le avise que llame a casa», explicó Ordóñez.
En la tripulación de peruanos y españoles también navegaban marineros naturales de Ghana. “Tengo cuatro amigos de Ghana en el barco, viven entre Marín y Pontevedra, tienen familia e hijos”, comentó Joshua, un vecino de Marín, sobre los tripulantes que iban en el Villa de Pitanxo.