Un padre de familia de origen senegales vive un verdadero drama. Tiene que decidir si sus dos hijas siamesas, cuyos cuerpos se encuentran unidos, son operadas para separarlas. Lo triste de esta situación es que de hacerlo, una de ellas inevitablemente morirá, en Inglaterra.
BBC informó que Ibrahima Ndiaye, de 50 años, debe tomar esta difícil decisión. Las menores tienen cerebro, corazón y los pulmones separados, pero comparte el hígado, al vejiga y el mismo sistema digestivo.
Este padre de familia viajó desde Senegal hasta Inglaterra en el 2018, debido a que existía la posibilidad que en el Hospital Great Ormond Streeet, pueda ayudar a sus pequeñas.
Pese a que ambas pequeñas se mantienen unidas, han podido desarrollarse y están próximas a cumplir los tres años.
Lamentablemente Ndiaye no puede tomarse mucho tiempo para definir esta situación, el corazón de una de estas pequeñas no está bien y corre el riesgo de colapsar provocando la muerte de los dos.
En un primer momento los médicos decidieron intervenir y separar a las menores, aunque esto signifique la muerte de una de ellas, pero el padre de familia se negó. Se resiste a tomar la decisión.
Lamentablemente si no son operadas, la muerte de una ocasionaría el deceso de la otra. Por ello Ibrahima Ndiaye debe tomar una decisión pronto, informaron los medios de Inglaterra.