Fatima Bridle (35 años) tuvo una prolongada lucha contra el coronavirus en el Reino Unido. Estuvo internada en el Hospital General de Southampton por 141 días, de los cuales pasó 105 con ventilador en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Aunque ya le dieron de alta, solo puede respirar con un pulmón.
Fatima Bridle estuvo en coma por 40 días. Le hicieron una traqueotomía, enfrentó una neumonía y siente que su recuperación es un milagro. Hasta ahora no puede creer lo doloroso que puede ser el coronavirus y lo difícil que es tratarlo. “Sigo sin creer que me haya despertado de todo esto. Siento que me han regalado una nueva vida”, dijo a The Sun.
Recuerda que dio positivo a coronavirus tras un viaje con su esposo a Marruecos. Fue el 12 de marzo cuando la ingresó al Hospital General de Southampton. A los 6 días fue enviada UCI. Su situación era crítica.
El 24 de marzo le informaron a su esposo Tracy que Fátima no había respondido a los antibióticos. “A las finales estuvo en coma durante 40 días y pensé que la estaba perdiendo. Recé mucho. Todo abril fue horrible. Me estaba volviendo loco. Lloraba todo el tiempo y me pusieron medicamentos”, dijo.
El esposo también contó que Fatima Bridle desarrolló sepsis (enfermedad en la cual el cuerpo tiene una respuesta grave e inflamatoria a bacterias u otros microorganismos). El panorama era más complicado todavía.
“Esa noticia fue horrible. La sepsis estaba matando las células sanguíneas. Su pulmón derecho funcionaba mejor que el izquierdo y tenía transfusiones. Después de algunas semanas dijeron que habían manejado la sepsis, pero luego volvió y ella luchó contra ella nuevamente” recuerda en entrevista con The Sun.
Durante el internamiento los pulmones de Fatima Bridle sufrieron graves daños. Ella recuerda que cuando estaba respirando con el ventilador sintió un dolor tremendo. “Me hubiera gustado estar muerta en algún momento. Fue muy aterrador. Quería gritar, pero no pude”, afirma.
Sin embargo, Fatima Bridle fue mostrando signos de recuperación. Diversos médicos del Hospital General de Southampton, especialistas en pulmones, dijeron que nunca había visto un progreso tan milagroso.
Ahora, Fatima Bridle respira con un solo pulmón debido a que uno quedó completamente dañado. A pesar de todo, se muestra bastante optimista y agradece a los profesionales que la atendieron, según 20 Minutos.
“El Hospital General de Southampton me salvó la vida. Todos fueron increíbles. Todos merecen una medalla”, asegura.