Una estadounidense se salvó de ser atacada de un camello al morderle sus partes íntimas cuando el animal estaba sentado sobre ella y casi la aplasta. El dromedario huyó después del accionar de la mujer, quien tuvo que ser hospitalizada.
La perra de la joven-quien no fue identificada-se había escapado en un parada de camiones en Grosse Tete, Louisiana, y terminó hasta un corral donde estaba el camello Casper.
Según el Washington Post, un empresario mantiene animales exóticos en cautiverio en ese lugar y Casper es una atracción.
Pese a los llamados de la dueña del can, la mascota es sorda y estuvo al lado de Casper hasta que la mujer llegó a rescatarla.
La estadounidense ingresó al corral, sin embargo, el camello la arrinconó contra una pared y casi la aplasta al sentarse encima. A la joven no le quedó más que morder los testículos del animal para salvarse. Casper huyó despavorido.
Los cuidadores determinaron que el dromedario-que tiene 18 meses de edad-no tiene lesiones graves. Felizmente, no pasó a mayores.
En ese lugar, además del camello, el propietario del corral tiene un coatí, un pony y un bebé canguro. Esto con la intención de crear un zoológico infantil.
Por su parte, la estadounidense está hospitalizada, aunque se desconoce qué clase de lesiones le dejó el animal.
La policía de Grosse Tete no denunciará al propietario del camello porque el animal estaba encerrado y con carteles que advierten a los visitantes que permanezcan alejados a 10 metros del corral.