En Bahamas, una joven estadounidense de 21 años fue atacada por tres tiburones cuando estaba buceando, pese a que su familia intentó advertirle de los animales, ella no escuchó y solo lograron recuperar parte de su cuerpo.
Paul Rolle, comisionado adjunto de la Fuerza Real de la Policía de Bahamas, contó que Jordan Lindsay fue atacada por tres tiburones cuando estaba buceando cerca de la isla Rose.
Según KABC-TV, los padres de Lindsay y otros miembros de la familia gritaron para advertirle, sin embargo, no los escuchó a tiempo.
Los escualos mordieron los brazos, piernas, nalgas y le cortaron el brazo derecho. Sus padres solo pudieron recuperar parte de su cuerpo.
La madre de la joven, Kami Lindsey, también estaba en el agua en ese momento. Aunque intentó sacar a su hija a orilla, la joven perdió demasiada sangre. Lindsay fue llevada a un hospital, siendo declarada muerta.
"Algunas personas que estaban en el agua en ese momento describieron la escena como de lo más terrible", dijo un turista que logró fotografiar a dos de los tiburones tras el ataque.
"Ya la extrañamos mucho. Ella era tan cariñosa, amaba a todos los animales. Es irónico que moriría siendo atacada por un tiburón", dijo su padre en un comunicado.
El Ministerio de Turismo y Aviación de Bahamas emitió una declaración en la que ofreció su pésame y "las más sinceras condolencias" a la familia.
Se ha creado una página en GoFundMe para ayudar a la familia con los gastos del traslado del cuerpo de Lindsay de regreso a California, que es muy costoso, así como para el funeral.