Un tribunal de apelaciones de Estados Unidos podría obligar a una adolescente de 16 años a convertirse en madre, luego que se le negara el derecho a un aborto tras determinar que “era demasiado inmadura” para decidir si debía interrumpir su embarazo.
La noticia llegó a esta joven luego que el último lunes la Corte de Apelaciones del Primer Distrito de Florida, a cargo de la jueza Jennifer J. Frydrychowicz, señalara que la menor de edad no estableció que “era lo suficientemente madura para decidir si interrumpir su embarazo”, según cuenta el New York Post.
La adolescente, a la que se hizo referencia solo como Jane Doe, se encuentra actualmente bajo el cuidado del Departamento de Niños y Familias de Florida hasta que cumpla 18 años; ya que no tiene padres, según un documento recogido por el medio.
Ella está “buscando un GED (Desarrollo Educativo General, por sus siglas en inglés) con participación en un programa diseñado para ayudar a mujeres jóvenes que han experimentado traumas en sus vidas”, agrega el fallo.
Jane Doe presentó una solicitud de aborto alrededor de las 10 semanas de embarazo, uno de los requisitos para menores de edad, según la ley de Florida. Mediante el escrito, ella buscó una “desviación judicial”, que usualmente ocurre cuando el adolescente quiere eludir el permiso de los padres.
En su petición ella indicaba que “no está lista para tener un bebé”, ya que actualmente está desempleada, aun asiste a la escuela y el padre del niño no puede ayudarla. Además de ello, alegó que no se sentía estable tras la muerte de un amigo cercano.
“Anteriormente había expresado su voluntad de tener el hijo, pero luego cambió de opinión después de considerar su incapacidad para cuidar a un niño en su posición actual en la vida”, señaló el juez Scott Makar, quien tiene una opinión distinta a la de sus colegas.
“Leyendo entre líneas, parece que el tribunal de primera instancia quería darle a la menor, que estaba bajo estrés adicional debido a la muerte de un amigo, tiempo adicional para expresar una comprensión más profunda de las consecuencias de interrumpir un embarazo”, agregó.
La decisión de la jueza aún está abierta a otra apelación, ya que no fue desestimada con perjuicio. “Podría, en una fecha posterior, articular adecuadamente su solicitud, y el Tribunal podría volver a evaluar su decisión en ese momento”, indicó Makar.
Sin embargo, las leyes de aborto restrictivas de Florida prohíben el procedimiento después de las 15 semanas de embarazo, lo que deja poco tiempo para tomar una decisión.
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