‘Yo tengo la culpa’, ‘Todo lo que hago está mal’, son frases que seguramente en algún momento de nuestras vidas nos hemos dicho. Pero esto se convierte en problema cuando lo hacemos con frecuencia y somos muy duros a la hora de juzgarnos por nuestro comportamiento o errores del pasado.
Según la psicóloga clínica de posgrado de la Universidad Norbert Wiener, Marilyn Toledo, la crítica hacia nosotros mismos no es mala. “El juicio crítico nos lleva al reconocimiento del crecimiento personal, lo malo está cuando no valoramos lo positivo y solo nos condenamos”, indica.
La especialista afirma que no deberíamos juzgarnos como si fuéramos los únicos que se han equivocado. “Pregúntate si el error que has cometido tiene solución y cómo puedes mejorarlo. Sé más amable y compasivo contigo mismo”, recomienda y da los siguientes consejos.
1. Escribe en una hoja pensamientos críticos, pero hazlo en tercera persona. Léelos.
2. Reconoce que no eres perfecto y que los demás tampoco lo son.
3. Realiza actividades en las que seas bueno, te den felicidad y bienestar. Así te sentirás más fortalecido y seguro de ti.
4. Anota en una hoja empezando el texto con un ‘Me merezco...’ y continúa la frase con las cosas que deseas.
Es fácil ver cómo una persona puede autodestruirse, solo con una pequeña dosis diaria de negativismo dirigido hacia su propio ser.
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