Las exigencias del día a día han hecho que la ansiedad y el estrés se apoderen de una gran parte de la población. Aunque parece un tema que no requiere de mayor atención, lo cierto es que es preocupante, ya que provoca trastornos de la salud tanto físicos y sensoriales tales como:
1. Dificultad para respirar. Muchas personas que sufren de ansiedad padecen la falta de aire y presión en el pecho. En ese momento, lo mejor es sentarse, separar las piernas y poner la cara entre ellas, mientras se respira profundo.
2. Malestar en los músculos. Esto se debe a que todo el cuerpo se encuentra tenso y alterado, lo cual provoca malas posturas al dormir o caminar y hormigueo muscular.
3. Dolor de cabeza. El estrés suele causar dolores de cabeza tensionales en diferentes zonas de la cabeza.
4. Enrojecimiento de la piel. La ansiedad hace que el sistema nervioso simpático lleve más sangre a los músculos, provocando enrojecimiento de la piel. También puede originar exceso de transpiración e inflamaciones.
5. Problemas de sueño. Más de la mitad de las personas que sufren estrés y ansiedad tienen dificultad para dormir y concentrarse durante el día.
6. Daño en el sistema digestivo. La tensión también afecta los intestinos y la absorción de nutrientes, causa ardor, hinchazón, diarrea e incluso problemas para controlar el esfínter (orina).
Contenido GEC