Un dolor de cabeza es el que se le ha presentado a Pep Guardiola en la antesala del Manchester City vs. Chelsea, por la final de la Champions League. Durante la última sesión de entrenamiento en el césped del Estadio Do Dragao, Ilkay Gündogan tuvo que abandonar el campo después de sufrir un fuerte golpe.
Unas imágenes que circulan en las redes sociales mostraron el momento preciso en el que el mediocampista se lastimó. En el ensayo con el balón sobre la cancha portuguesa, el germano se golpeó el muslo durante un cruce contra su compañero Fernandinho, uno de los líderes del conjunto ‘Sky bleu’.
Enseguida, Gündogan se incorporó con cierta dificultad. En ese estado, el jugador no podía seguir con la actividad en el terreno. Así que, el volante se marchó a los camerinos para ser revisado por el equipo médico de Manchester City que, por el momento, no se ha pronunciado oficialmente.
Eventualmente, Guardiola perdería a uno de los titulares fijos de su equipo a lo largo de la campaña. El germano, además de ser clave para el técnico español, también es el máximo artillero del primer equipo en lo que va de la campaña y suele compartir ese sector del terreno con español Rodri y al belga Kevin De Bruyne.
La otra cara de la moneda
Los jugadores de Chelsea, N’Golo Kanté y Edouard Mendy, estarán disponibles este sábado para la final de la Liga de Campeones. Ambos estaban en duda, pero Thomas Tuchel confirmó en la rueda de prensa previa al partido que han viajado con el equipo y que se entrenarán con normalidad y por lo tanto estarán listos para medirse a Manchester City.
El centrocampista galo sufrió un problema en los isquiotibiales antes del partido del fin de semana contra el Aston Villa y no pudo ser de la partida, mientras que Mendy se dio un golpe en las costillas y se tuvo que someter a pruebas para descartar una fractura. La recuperación del senegalés cierra las puertas de la final al español Kepa Arrizabalaga.
La palabra de los entrenadores
Pep Guardiola desveló en la víspera que “no esperaba ni jugar una sola final. Sé lo que les voy a decir a mis jugadores. Al que esté nervioso o ansioso le diré que es lo normal. Cada uno intentará manejarlo de la mejor manera posible. El que esté tranquilo y relajado, también es normal”.
Por su lado, Tuchel comentó que “es una gran sensación llegar a una final como esta. Confío en todo el mundo, todos tienen hambre. Están muy concentrados y son muy disciplinados. Ayer tuvimos una sesión de entrenamiento más táctica, la de hoy será mucho más ligera”.