La innovación también está en el rubro de las flores, y eso nos confirma Elvis Chávez, un piurano que llegó a Lima para trabajar junto a sus hermanos en la Plaza de Flores de Barranco. Él aprendió desde muy joven a hacer una gran variedad de arreglos con los que captó a sus clientes y con lo que ha podido sacar adelante a su familia.
Elvis nos cuenta que el rubro de la florería fue una de las más golpeadas por la pandemia, pues el año pasado muchos productores perdieron toda su producción porque no había movilidad para que transportara los productos a la capital. Además, los eventos, reuniones y ceremonias se cancelaron debido al confinamiento.
LAS ENGREÍDAS DEL HOGAR
A pesar de que el futuro es incierto, Elvis dedicó el tiempo de cuarentena para investigar sobre lo último de este rubro y se dio con la sorpresa de que la flor de col y la de cebolla ingresarían con fuerza en el mercado, así que se las trajo a su puesto y ha tenido muy buenas ventas. “La flor de col es muy fácil de combinar, yo le pongo follajes de eucaliptos y erigíos. Se hacen canastas y hermosos ramos”, detalla.
Entre otras flores que tienen gran demanda son: la flor de cebolla, Verónicas, Hortensias, Margaritas, Lirios, Hierberas, Erigíos, Astromelias, Gingers, Aves del Paraíso, Musas, y una variedad de follajes que vienen de Huánuco, Tarma y Caraz.
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