El pescado es uno de los alimentos mas consumido en verano por ser muy nutritivo y bajo en calorías, pero para evitar poner en riesgo la salud de nuestra familia ante las altas temperatura de este verano, es importante saber si el que compramos es fresco o en condiciones óptimas para su consumo.
Ante ello, la nutricionista del Programa Nacional “A Comer Pescado” del Ministerio de la Producción, D’Janira Paucar, nos da algunas recomendaciones para elegir un buen producto:
- La piel del pescado que queremos comprar debe ser brillante y viva.
- Sus ojos deben ser brillantes, transparentes y saltones.
- La carne del pescado debe ser firme, lo cual se puede comprobarse al tocarla cuidadosamente la carne. Si al presionarla vuelve a su sitio rápidamente, quiere decir que está fresco.
- Las agallas deben ser de un color rojo intenso. No escoger piezas con agallas de color gris o amarillento.
- El olor del pescado debe ser agradable y fresco a mar
- En caso de tener escamas, estas deben ser brillantes y estar firmemente adheridas.
- El pescado que va a comprar debe estar siempre sobre una capa de hielo. Si los comerciantes no lo tienen sobre hielo, se corre el riesgo de comprar un producto en proceso de descomposición.
- El pescado debe ser la última compra que se realiza en el mercado. Se recomienda, comprar primero los abarrotes, seguido por las verduras y al finalizar el pescado u otras carnes.
- Una vez que llegue a casa, si no lo va a preparar inmediatamente, el pescado se debe refrigerar. Puede durar hasta dos días en la parte baja de la refrigeradora.
- Si no lo va a preparar ese mismo día ni tampoco el día siguiente, se recomienda congelar el pescado inmediatamente para no afectar su inocuidad ni calidad nutricional.
- Para congelarlo, asegúrese de que le hayan retirado las vísceras y escamas.
- Antes de meterlo a la congeladora, límpielo con un paño húmedo limpio, sin exponerlo al agua directamente; córtelo en trozos o filetes, dependiendo de cómo se va a cocinar tras su descongelación.
- Las piezas de pescado deben guardarse en el congelador dentro de una bolsa de plástico transparente o en un recipiente que cierre herméticamente.
- El tiempo máximo de congelación recomendado para los pescados azules (bonito, jurel, caballa) es un mes, mientras que para los pescados de carnes blancas es de hasta dos meses.