La Organización de Estados Americanos (OEA) cuenta con una herramienta conocida como la Carta Democrática Interamericana, a la cual el presidente Pedro Castillo está apelando para que la autoridad internacional se pronuncie sobre la situación del Perú.
MÁS INFORMACIÓN: Municipalidad de San Isidro declara ‘persona no grata’ al presidente Pedro Castillo
Esta no es la primera vez que el mandatario peruano asegura que buscarán la activación de esta institución de la OEA, pero sí la primera vez en lo que va de su mandato que formalmente concreta la solicitud para que el Consejo Permanente se reúna para decidir acciones a tomar.
El presidente Pedro Castillo apela a la comunidad internacional con este último intento para frustrar las investigaciones y la denuncia constitucional en su contra ante el Congreso, en el cual platean como opciones su suspensión del cargo.
La Carta Democrática Interamericana es el documento firmado por los Estados miembros de la OEA que plantea aspectos básicos que deberán respetar los países para garantizar que hay principios democráticos en sus instituciones.
Se basa en el hecho de que ‘los pueblos de América tienen derecho a la democracia y sus gobiernos la obligación de promoverla y defenderla”, como establece en su primer artículo.
La carta toma como inspiración la Carta de la OEA que estableció la fundación de esta institución internacional y actualiza sus puntos para volverlos aplicables.
Puedes revisar la Carta Democrática Interamericana completa en este enlace oficial de la OEA.
La carta fue aprobada el 11 de setiembre del 2001 precisamente en una sesión especial de la Asamblea de la OEA en Lima y a pedido del Gobierno peruano luego de la tercera reelección de Alberto Fujimori y su salida del cargo a fines del 2000, cuando trató de renunciar durante un viaje oficial y fue oficialmente vacado por el Congreso.
El documento fue impulsado durante el gobierno de transición del año 2000 por el entonces presidente del consejo de Ministros, Javier Pérez de Cuéllar, y luego por el canciller Diego García-Sayán y el representante del Perú ante la OEA, Manuel Rodríguez Cuadros.
La carta está dividida en seis capítulos: I) La democracia y el Sistema Interamericano, II) la democracia y los Derechos Humanos, III) Democracia, desarrollo integral y combate a la pobreza, IV) Fortalecimiento y preservación de la institucionalidad democrática, V) La democracia y las misiones de observación electoral, VI) Promoción de la cultura democrática.
Específicamente, el capítulo IV es el que contiene los artículos 17 y 18 que el gobierno de Pedro Castillo ha pedido sean utilizados para activar la Carta y la OEA se pronuncie sobre la situación en el Perú.
Según el portal de la OEA, hasta el 2016 este capítulo específico de la Carta Democrática Interamericana se había activado diez veces, siete de ellas con aplicación preventiva para evitar el escalamiento de crisis políticas.
El artículo 17 de la Carta Democrática Interamericana permite que un Estado miembro pueda recurrir al secretario general de la OEA, en este caso Luis Almagro, o al Consejo Permanente para pedir asistencia en el fortalecimiento de su institucionalidad democrática.
El artículo 18 precisa que, cuando haya situaciones que afecte el proceso político institucional democrático o el “legítimo ejercicio del poder”, la OEA podrá realizar visitas y otras gestiones para analizar la situación del Estado miembro.
“El Secretario General elevará un informe al Consejo Permanente, y éste realizará una apreciación colectiva de la situación y, en caso necesario, podrá adoptar decisiones dirigidas a la preservación de la institucionalidad democrática y su fortalecimiento”, precisa la segunda parte del artículo 18.
Contenido GEC