El expresidente Alejandro Toledo, que en las próximas horas estará siendo extraditado al Perú para responder ante la justicia por las coimas de más de 35 millones de dólares que le habría otorgado Odebrecht, ha tenido una carrera política marcada por los escándalos y uno de los más notorios fue el caso del reconocimiento de su hija Zaraí. ¿Qué ha sido de la vida de esa niña que llegó a las pantallas peruanas antes de entrar a la adolescencia y sorprendió por su madurez y su forma de hablar?
Dueña de un discurso elocuente desde pequeña y una valentía que la llevó a confrontar a su padre biológico, el entonces presidente del Perú, Zaraí se convirtió en una doctora en ciencias políticas de la Universidad de Columbia Británica, magíster en ciencias políticas por la Universidad de Carleton en Canadá y licenciada en sociología por la Pontificia Universidad Católica del Perú.
Tal como lo hacía cuando era niña, la ahora politóloga de 34 años sigue al tanto de la realidad del país y en los últimos años ha sido entrevistada por varios programas periodísticos para dar su opinión sobre la coyuntura política.
SE CASÓ
En junio de 2021, Zaraí contrajo nupcias con un joven de nombre Fabio Resmini, según dio a conocer el portal de Instagram Instarándula a través de unas fotos que publicó en sus historias.
En las imágenes que compartió el portal de entretenimiento del periodista Samuel Suárez, se aprecia la ceremonia privada que se realizó en la ciudad de Vancouver, Canadá.
“¿Sabían que Zaraí Toledo, hija del expresidente Toledo, se casó en Vancouver, Canadá, con un chico llamado Fabio Resmini?”, se leía en el texto que acompañaba las instantáneas.
Su matrimonio no tuvo una boda tradicional, ya que sus invitados se conectaron por videollamadas, debido a que ocurrió en tiempos de COVID-19 y se debía mantener las medidas de bioseguridad para evitar el contagio masivo.
Resmini es graduado de la Escuela de Artes de la Università Cattolica del Sacro Cuore, y cuenta con una maestría en Ciencias Políticas en la Universidad de California, así como un máster en Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Universitá Di Bologna y un PhD en Ciencias Políticas y Gobierno en la Universidad de Columbia Británica.
LA LUCHA DE ZARAÍ
Gracias a un reportaje de Panorama emitido en el año 2002, el exmandatario tuvo que reconocer a la hija que tuvo con Lucrecia Orozco, tras un breve romance que tuvieron luego de la separación del expresidente con Eliane Karp a mediados de la década de los 80.
En aquel entonces, la reportera Rosa Vallejos reveló que Toledo se había reunido con el vocal José Silva Vallejos, quien había anulado días antes la realización de la prueba de ADN del líder de la chakana, con la cual se demostraba su paternidad.
Finalmente, en octubre de 2002, Lucrecia Orozco confirmaba que Toledo había acordado reconocer a la entonces adolescente de 14 años para poner fin a las demandas planteadas en los tribunales.
El caso Zaraí se convirtió en uno de los puntales en la guerra sucia contra Toledo durante la campaña electoral de 2000, pero no le impidió llegar a la Presidencia, un año después, pese a ser cuestionado públicamente por sus valores morales.
Precisamente, este hecho le restó credibilidad y redujo su popularidad hasta el 17 por ciento, en sólo un año en el Gobierno. En el fragor de la campaña en su contra, Toledo prometió que se haría la prueba del ADN si los tribunales lo ordenaban, pero una vez que fallaron en ese sentido, sus abogados rechazaron la medida.