A pesar de que al mes ganaba unos 10 mil soles, el alcalde del distrito de Chilca, provincia de Cañete, Richard Ramos Ávalos, ‘Colita’ o ‘Número 1’, vivía como un magnate. Tenía una lujosa mansión con piscina y hasta cancha de fútbol profesional con césped sintético. Allí guardaba 240 mil soles y 30 mil dólares en efectivo.
Todos estos lujos salieron a la luz la madrugada de ayer, cuando el fiscal contra el crimen organizado, José Cuya Berrocal, acompañado de un contingente policial, allanó el inmueble por la investigación que enfrenta el burgomaestre, quien integraría la organización criminal ‘Los Rucos’, dedicada al tráfico de tierras, homicidio y sicariato.
En el lugar también se halló un auto Chevrolet, modelo Camaro, una cuatrimoto, un televisor gigante, palcos alrededor de la cancha y otros lujos.
A PRISIÓN
“Era un personaje con bastantes indicios de tener una situación personal y una conducta que no correspondían a la de una autoridad honesta”, afirmó el ministro del Interior, Carlos Basombrío.
En el operativo, que contó con 70 fiscales y cerca de un millar de policías, se intervino en forma simultánea a 35 personas en Chilca, Breña, Chorrillos, Cercado de Lima, Miraflores, San Borja, San Martín de Porres, Surco y Pucusana.
La banda, que era integrada por un expolicía, tenía como cabecilla a Jorge Amable Palacios, ‘Ruco’.
Ramos Ávalos y sus coprocesados fueron traídos a Lima e internados en la carceleta de la Policía de Seguridad del Estado, al tener diez días de prisión preliminar.
Según el Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE), el alcalde es propietario y representante legal de la empresa Framer, proveedora del municipio.
(Miryam Beteta)
PREVIAUna cuatrimoto, una cancha privada de fulbito, un televisor de 65 pulgadas, un costoso auto deportivo valorizado en más de 25 mil dólares, son solo algunos de los lujos que ostentaba el detenido alcalde de Chilca, Richard Ramos Ávalos antes de ser detenido por la Policía Nacional.
Además de estos lujos que tenía en su vivienda, al alcalde de Chilca se le encontró más de 240 mil soles y 30 mil soles en efectivos, dinero que no supo explicar de donde provenían.
La Policía Nacional estuvo ocho meses tras los pasos del alcalde de Chilca, Richard Ramos Ávalos, quien al parecer era el nexo para que una banda de tráfico de tierras, homicidas y sicarios consiguieran sus objetivos.
"Hasta el momento se ha establecido que la red integrada por Richard Ramos Ávalos alcanzaba a al menos 39 personas, de las cuales 35 – incluido el funcionario – ya están en manos de las autoridades", indica el comunicado de prensa del Ministerio del Interior.