Era la mejor oferta que había visto en su vida: un camión estaba siendo vendido al módico precio de 200 dólares. Según los vendedores, el costo se debía a que los propietarios de la unidad ya no lo necesitaban, por lo que requerían deshacerse de él lo antes posible.
Aunque resulte increíble creerlo, esta transacción comercial, que parecía ser demasiado buena, ocurrió en Florida, Estados Unidos.
Sin embargo, detrás de esta posible venta había una macabra historia que se descubrió luego de que uno de los posibles compradores decidió que lo mejor era informar a la policía. ¿Qué fue lo que realmente sucedió? A continuación, los detalles de este caso.
Todo se inició cuando una mujer en Florida estaba tratando de vender un camión a solo 200 dólares. Su argumento era que necesitaba quitarse cuanto antes esta carga de las manos.
Es así como llegó el primer comprador, pero tras preguntarle por qué la prisa en vender dicha unidad tan barata, la respuesta lo dejó estupefacto, publicó The Washington Post.
La vendedora que fue identificada como Amberlyn Nichols, de 19 años, señaló sin dudar que los propietarios habían sido asesinados.
“En realidad le estaba diciendo a la gente que la víctima recibió un disparo en la cabeza y que estaba muerta, y que necesitaban deshacerse de su camión”, dijo en una conferencia de prensa el sheriff del condado de Polk, Grady Judd, quien narró la conversación entre el comprador y el vendedor.
Ante la respuesta de la ofertante, el posible comprador denunció el caso a la Policía, que tras tomar conocimientos indagó sobre el paradero de los dueños del vehículo.
Fue así que tomaron conocimiento de que la pareja de esposos, propietaria del camión, estaba desaparecida hace algunas semanas.
El viernes 6 de marzo, agentes del alguacil llegaron a la vivienda de Raymond Mark Cline (33) y Crystal Ann Cline (37), dueños de la unidad, pero no los encontraron. Sus vecinos señalaron que vieron por última vez al esposo el 21 de febrero.
Sin embargo, quien sí estaba al interior del inmueble era la vendedora Amberlyn Nichols, quien dio pistas de su paradero, pues dijo que había participado en el doble homicidio de los esposos.
Ella contó que su padrastro Todd Michael Jackson (34) decidió acabar con la vida de ambos porque le debían mucho dinero, aproximadamente US$ 30.000. Es así que dos semanas antes, este ingresó a la casa de los Clines cuando dormían, por lo que aprovechó ese momento para dispararles.
“No solo estaban dormidos en la cama, sino que estoy seguro de que podrían haber estado teniendo sueños maravillosos. Todd Jackson es el que realizó los disparos fatales en el cuerpo de [Raymond] Mark y Crystal, mientras estaban profundamente dormidos en su casa”, dio a conocer el sheriff.
Tras el crimen, Jackson habría llamado a Nichols y a su novio Larry ‘LJ’ Waters Jr. (19), para ayudar a limpiar la escena del crimen.
Como tenían que desaparecer los cuerpos, los dos varones quitaron el aire acondicionado de dicho ambiente antes de empujarlos por la ventana del dormitorio para posteriormente trasladarlos en una carretilla a un pantano, ubicado detrás de la vivienda.
El sheriff dijo que luego de que Nichols confesó el crimen, le pidió que le enseñe dónde estaban los cuerpos, los cuales se encontraban en estado de descomposición.
“Tengan en cuenta lo extraño de esto. ¿Por qué en el mundo uno de los perjudicados estaría tratando de vender el camión por US$ 200 y decirle a la gente que las víctimas no lo necesitan porque fueron asesinados? Simplemente loco”, mencionó Judd.
Después de conocer los hechos, se arrestó a tres personas: Todd Michael Jackson (34), Amberlyn Nichols y Larry ‘LJ’ Waters Jr. (19). El primero enfrentará cargos de asesinato en primer grado, mientras que los restantes fueron acusados de cómplices.
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