IMPRESIONANTE. En una intervención quirúrgica de alta complejidad, los médicos del Hospital Nacional Sergio E. Bernales, en el distrito de Comas, lograron salvar la vida de una mujer de 58 años al extirparle un tumor de más de 15 kilos.
La paciente, quien ingresó al nosocomio de la zona de Collique días antes, presentaba terribles dolores en la pelvis, abdomen y espalda por lo que fue evaluada con exámenes de imágenes, los mismos que evidenciaron un tumor gigante, sospechoso de cáncer de ovario con comportamiento incierto.
“La paciente llegó al Hospital Nacional Sergio E. Bernales con dolores en el abdomen, espalda y pelvis; y aumento del volumen abdominal, por lo que fue sometida a exámenes auxiliares que evidenciaron un tumor. Tras la operación, la paciente reaccionó favorablemente y pudo ser dada de alta en tres días”, señaló el Dr. Eduardo Paredes Ayala.
La operación, que consistió en una histerectomía abdominal total (extracción del útero), fue llevada a cabo por un equipo multidisciplinario de especialistas del citado hospital público perteneciente al Ministerio de Salud (Minsa).
La cirugía, que duró más de tres horas, fue dirigida por el doctor Ronald Araujo Huamaní, cirujano gineco-oncólogo; acompañado por el doctor Eduardo Paredes Ayala, también cirujano gineco-oncólogo; la anestesióloga doctora Melisa Torres y la residente Susan Mori, del Departamento de Ginecología y Obstetricia del hospital.
La paciente llegó al hospital con intensos dolores en la pelvis, abdomen, espalda y aumento del volumen abdominal. Tras realizarse exámenes de imagen, los médicos detectaron un tumor gigante, sospechoso de ser cancerígeno. Ante la gravedad del caso, se decidió proceder con una intervención quirúrgica inmediata.
“El tumor encontrado en la paciente no solo era de un tamaño considerable, sino que presentaba un riesgo significativo de ser maligno. La intervención era necesaria y urgente”, explicó el doctor Paredes Ayala.
Después de la operación, la paciente mostró una recuperación favorable y fue dada de alta en tres días.
Paredes Ayala subrayó la importancia de los chequeos ginecológicos anuales para todas las mujeres, especialmente para aquellas con antecedentes familiares de cáncer y mujeres mayores de 40 años. Además, recomendó que las mujeres entre 25 y 29 años se realicen despistajes oncológicos cada tres años.
“Un diagnóstico temprano puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Es vital que las mujeres se realicen chequeos periódicos para prevenir y tratar a tiempo cualquier anomalía”, remarcó.
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