En Nuevo León, México, una mujer se quedó dormida en el baño de un restaurante y se despertó cuando ya no había nadie en el establecimiento. Al darse cuenta de lo ocurrido pidió ayuda y, gracias a un policía, pudo ser liberada luego de varias horas de encierro.
María Elena Ibarra, de 44 años, había llegado a un local de KFC para comer. Una vez que terminó, se dirigió a los servicios higiénicos, pero el cansancio habría ocasionado que se quedara dormida en el interior.
Pasaron 5 horas y cuando Ibarra salió del baño, se dio cuenta de que no había nadie en el lugar. Increíblemente, el personal no se dio cuenta de su presencia y las puertas habían sido cerradas.
Antes de pedir ayuda, la mujer se dio tiempo de ir a la cocina para comer unas piezas de pan. Posteriormente, se dirigió a la puerta e intentó abrirla, pero estaba cerrada con llave. Sin perder la calma, Ibarra se quedó cerca de la entrada, a la espera de alguien que pudiera ayudarla.
Afortunadamente para ella, unos policías que patrullaban por el lugar la vieron mientras golpeaba las ventanas. Rápidamente, contactaron a los gerentes del restaurante para abrir las puertas y pudieron liberarla.
Cabe agregar que se presume que la mujer es una persona en situación de calle.
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