El cumpleaños de un pequeño terminó de la peor manera, según un video que se ha viralizado en las redes sociales y que ha causado miles de reacciones. La popular mordida se salió de control luego de que un compañero del cumpleañero le aplastara el rostro contra el pastel repetidas veces.
Fue a través de TikTok que el épico momento fue difundido. En pocas horas el clip dio la vuelta al mundo causando todo tipo de comentarios en la plataforma debido a la pelea que protagonizaron los niños al momento de que el agasajado terminó de soplar la velita y pedir sus deseos.
En las imágenes de @toshirons se aprecia que el cumpleañero estaba a punto de darle la clásica mordida a su torta de cumpleaños, cuando uno de los niños invitados a su fiesta le empuja la cara provocando que se embarre todo el rostro con la crema; sin embargo, el lío no terminó allí.
Segundos después, el mismo menor lo vuelve a empujar varias veces, ocasionando que el dueño del santo se enojara y rompa en llanto mientras le metía manotazos al pastel. Entre los gritos del niño, su compañero vuelve a empujarle la cabeza, provocando de una de las niñas presentes salga en la defensa del pequeño que cumplía años y agarre a golpes al molestoso que se quiso hacer el gracioso.
A las finales tanto el cumpleañero como el bravucón terminaron llorando; sin embargo, a los segundos el menor golpeado vuelve a empujarle la cabeza sobre el pastel al muchacho que festejaba un año más de vida. Ante esto, otro de los menores asistentes intentó también embarrarle la cara de pastel al que se quiso pasar de listo haciendo que estallara en llanto.
A la fecha, el video suma más de 22 millones de reproducciones, más de un millón y medio de ‘me gusta’ y tiene más de 30 mil comentarios dentro de los cuales destacan los siguientes:
“Abusivo, pero cuando se lo quisieron hacer a él, bien que chilló”, “Éstos serán los hombres del futuro, sin límites, con educación deficiente, modales nulos”, “Qué niños tan maleducados, en una de ésas pasa algo y entonces las lamentaciones”, “Pobres familias, caray, denotan un descontrol total sobre las conductas iniciales de los hijos”, “Nunca me ha gustado eso de la famosa mordida. Se me hace innecesario, patético y peligroso”.
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