Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un saltadito de pollo con arrocito graneado y ensalada fresca con lechuga, pepino y cebolla. Para tomar pidió una jarrita de cebada tibia. “María, el jueves la entidad meteorológica de los Estados Unidos anunció que el fenómeno El Niño ya se inició y podría alcanzar su punto máximo entre noviembre de 2023 y enero de 2024. Las consecuencias podrían ser devastadoras: fuertes lluvias, inundaciones y huaicos en Sudamérica, el Caribe y América del Norte, además de sequías de gran intensidad y un mayor riesgo de incendios forestales en Australia, Indonesia y el sur de África.
Todo esto traerá un impacto económico fuerte en la población, en especial en el Perú. El gobierno de Dina Boluarte tiene una carrera contra el reloj para prepararnos y mitigar los efectos de este fenómeno, haciendo las obras que impedirán inundaciones de las ciudades y la destrucción de caminos, puentes y otras infraestructuras.
Que no nos pase como la última vez con el ciclón Yaku
No solo eso, el Ministerio de Economía debe dar normas clave para reactivar nuestra economía, como por ejemplo no aplicar el Impuesto Selectivo al Consumo a las bodeguitas de barrio, de las que viven miles de familias de emprendedores, que ante la crisis han montado tiendas de abarrotes en sus casas. Que el gobierno y la Sunat cobren a las miles de empresas informales, a la minería ilegal, a los evasores de cuello y corbata.
Que no se metan con peruanos humildes que solo buscan llevar un pan a su mesa de la manera más honradaHagan trabajar a los burócratas que no se quieren ensuciar las manos persiguiendo a los grandes evasores. También hay que hacer campañas para que la gente sepa qué hacer cuando llegue el temporal, como a través de alarmas o llamadas por WhatsApp. Se debe reforzar las riberas de los ríos y evacuar las construcciones en esas zonas. También organizar equipos de rescate con helicópteros y aviones. Que esta vez no nos sorprenda mal preparados y no tengamos que lamentar muertes y desgracias. Tenemos algunos meses para prepararnos.
Esta es la oportunidad para que la presidenta Boluarte demuestre que es capaz. Por eso, desde ahora debe sacar de su gabinete a los ministros que no dan la talla. Ya tiene un ejemplo con el caso del dengue. La titular de la cartera de Salud dijo triunfante hace unas semanas que el dengue estaba controlado, pero los muertos por este mal pasarían de los 200 y, al menos en Piura, los hospitales están colapsados y los medicamentos, como el ibuprofeno, andan por las nubes. La población también debe mostrar conciencia y tomar previsiones. Ahorrar y adecuar sus viviendas para esto casos. Especialmente los que viven cerca de los ríos o torrenteras. Aunque lo mejor es reactivar la economía, porque lo que se viene es muy fuerte”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.