Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un adobo de chancho con su arrocito blanco y lentejitas bebé. Para tomar pidió una jarrita de naranjada. “María, en estos días hay que tener mucho cuidado con nuestro dinero, ese que ganamos con años de esfuerzo y disciplina de ahorro.
No solo nos puede robar un ‘arranchero’ en la calle y un raquetero, sino también un economista y empresario de cuello y corbata. Hace poco se conoció el caso del ex ministro de la Producción, Piero Ghezzi, quien habría sido estafado con un fondo de inversiones que en realidad era una pirámide.
Según el diario Perú 21, el destacado economista y exfuncionario en bancos de inversión extranjeros, perdió 3.5 millones de dólares. Imagínense, si a un profesional de ese calibre lo hacen ‘cholito’, fácil estafan a otros cientos de miles de peruanos. Por eso muchos siguen cayendo con el cuento de la cascada.
Se trata de hábiles timadores que se hacen pasar por humildes personas iletradas y provincianas que afirman tener problemas para cobrar un billete de lotería o vender una pepita de oro. Encuentran en la calle a una víctima ambiciosa, quien se deja llevar por la promesa de compartir la fortuna y entrega todo lo que tiene en ese momento y hasta cosas de su casa.
La codicia es mala consejera. Por eso, si tiene pensado hacer una inversión, haga una investigación antes, certifique lo que los vendedores o negociantes le dicen. Hace unos meses corrió como rumor en Lima y otras partes del país el negocio de las cryptomonedas.
Muchos compraron este dinero virtual, que hoy se ha caído al sótano y han perdido miles de soles, otros incluso sus pensiones de las AFP. Mi abuelo tenía un dicho: ‘El dinero es el diablo’. Sí, pues, cambia a muchas personas. La ambición convierte a muchos en delincuentes.
En los años 90, Carlos Manrique, el ‘Tío Cheverengue’, tenía la imagen de un anciano bonachón y confiable, pero estafó a cientos de miles de peruanos con el cuento de CLAE, una supuesta empresa de fondos de inversiones que en realidad era una pirámide.
Consejos para no caer víctimas de estafas
- Entre a los organismos estatales como Proinversón, Superintendencia de Banca y Seguros para saber si la empresa que quiere sus fondos es legal.
- Antes de invertir, investigue, pida documentos impresos respecto a la inversión.
- Obtenga el nombre y la información de la empresa del vendedor que le ofrece la inversión. Investigue todo lo que pueda antes de tomar una decisión respecto a su dinero.
- Tómese un tiempo antes de soltar el dinero. Consulte a varios especialistas”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.
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