Hay un patita que no ‘Hiena’ con su rendimiento en ningún lado

Del saque somos carnecita… Mi frase favorita, preferida y que la tengo en la punta de la lengüita es ‘cuando dos tramposos se juntan…’. Sobran argumentos para decir que es un juego de naipes, de cartas, de fichas, porque a veces es una partida de ajedrez. Pero, ojo, no es un juego de azar porque nunca hay un ganador. Se empata en el último minuto, porque esos o esas siempre tienen un as bajo la manga. Por interés, gustito o capricho. El corazón del infiel late, pero no se emociona. No tiene freno de mano. Fluye el deseo o el dinero. Nada más. Hay una pareja de la farándula que acabó su relación y yo la tengo clarísima. Ella, así venga de arrepentida y de rodillas a gritarme que se ha plantado, no le creo. Él, así llore y jure que está sufriendo, me hago el sordo. Es una actuación. El arte de la calle, de la mañosería, de los enfermitos, de la mentira, de la traición. Sí, señores…

Por siaca, aquí somos bien varones para reconocer que le pusimos demasiado condimento a un dato del martes. Es cierto que la ‘Comba’ tiene un romance de siete meses con la ex de un colega, pero hay que aclarar que la señora lleva 3 años divorciada del ‘Rey’ de la Copa Perú. Así que el rosado no rompió códigos ni partió a nadie. La relación se dio sanamente y por cosas del destino. La conoció en un ambiente alejado del fútbol. El chalaco es buena persona y caballerito. No como otros que sí son fuleros y atropelladores. Así es…

Hay un patita, que no ‘Hiena’ con su rendimiento en ningún lado donde lo contratan, que se cree sabidazo, palomilla, rata. Lo peor es que el grupo no lo quiere, le da con la coba. Compañeros y dirigentes. Que le dé gracias al ‘Gatito’ que lo apadrina porque ahorita estuviera recurseándose en festivales y terrales. Es vivo para gritar de lejos, pero no se da cuenta lo que le pasa de cerca. Y una chiquita, una pista para tu libro: cerca de la avenida Colonial, toda la vida te agarraron de sonso. Ahora cómete el cerebro y pregunta por qué. Ayayayayayay…

Me pasan la voz que el viernes por la noche, en el terminal terrestre de Plaza Norte, un excaudillo a regañadientes se tomaba foto y firmaba autógrafos a los hinchas. Se le notaba fastidiado antes de viajar a Huaraz, donde el domingo perdió 2-0 con Sport Áncash. Cómo no hace muecas cuando le tira maicito a la mamá de su hijo que no ve y encima no le manda ni para la movilidad del colegio: ‘a la vuelta está el hotel’. Eso lo pinta de cuerpo entero. Y no va a ser… Me voy, soy fuga.

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