Al menos 13 personas resultaron heridas durante un tiroteo en una estación del metro de Brooklyn en Nueva York (Estados Unidos), donde fueron encontrados “varios dispositivos no detonados”, señalaron las autoridades la mañana de este martes.
“A las 08:27 a.m. la policía respondió la llamada al 911 de una persona herida en el metro” en Brooklyn, dijo a la AFP una portavoz de la policía de Nueva York.
El departamento de bomberos dio una cifra de “13 heridos por el momento” mientras que la cadena ABC News citó a fuentes policiales que informaron que al menos cinco personas fueron heridas de bala en el incidente ocurrido en la estación de la calle 36.
Las autoridades estadounidenses aún se encuentran en la búsqueda de un hombre vestido con un chaleco naranja de constructor y una máscara de gas como el presunto responsable de la violenta escena.
No existen reportes de incendios dentro del metro, pero, según detalló ABC, este sujeto pudo haber lanzado “múltiples dispositivos de humo” para distraer a la gente. Asimismo, aún se desconoce el motivo por el este hombre que habría provocado los disturbios.
Fabien Levy, secretario de Prensa del alcalde de Nueva York, Eric Adams, señaló que está al tanto del tiroteo y “mientras recopilamos más información, pedimos a los neoyorquinos que se mantengan alejados de esta área por su seguridad y para que los socorristas puedan ayudar a los necesitados e investigar”.
Un vocero del Departamento de Educación de Nueva York explicó a la CNN que todas las escuelas cercanas al área de Brooklyn tienen una orden de “refugio”, por lo que nadie está autorizado a dejar sus instalaciones y que solo los estudiantes están aptos para ingresar a los colegios.
En uno de los videos publicados en las redes sociales se ve a un grupo de pasajeros acercarse a la puerta de salida del metro, aun en movimiento, tras escuchar disparos provenientes de otro vagón.
La Casa Blanca dijo que el presidente Joe Biden había sido informado del incidente y estaba en comunicación con las autoridades neoyorquinas.
Los tiroteos masivos se producen con relativa frecuencia en Estados Unidos, donde las armas de fuego causan unas 40.000 muertes al año, incluidos los suicidios, según el sitio web Gun Violence Archive.
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