“Uno no viene a trabajar esperando abrir la puerta de un tráiler y toparse con una pila de personas muertas”. Así de crudo fue el mensaje del jefe de bomberos del estado de Texas (EE.UU.) Charles Hood, quien, tras el hallazgo de 50 cadáveres de inmigrantes dentro de un camión, alertaba sobre lo trágico que sigue siendo el drama migratorio en América.
Hood fue convocado tras un llamado al 911 donde se denunciaba el hallazgo de un cuerpo al finalizar la tarde del último lunes. Una persona encontró un cadáver en la calle, cerca de la base de la Fuerza Aérea de Lackland, a solo 16 kilómetros del centro de la ciudad, cuenta El País.
Además de hallar el cuerpo, el informante señaló haber escuchado gritos que provenían del interior de un remolque, muy cerca de las vías del tren.
Alertados de la situación, la policía llegó hasta el lugar y la escena fue macabra. Un cuerpo yacía afuera del vehículo. “Había otros visibles en cuanto abrieron la puerta del camión”, declaró Hood. De inmediato llegaron otras 20 unidades con 65 bomberos y una decena de ambulancias.
Las personas estaban apiladas entre vivos y muertos. No tenían aire acondicionado ni agua para poder soportar el intenso calor que se vive en esta temporada del año en los Estados Unidos. El primer inmigrante vivo fue rescatado minutos después de las 06:00 p.m., el último, a las 06:57 p.m.
El viernes pasado, el servicio meteorológico de Texas alertaba de la ola de calor que viviría la ciudad durante esos días, superando incluso temperaturas de 46 grados en algunas partes de Texas y en otras zonas de Florida.
Por su parte, el alcalde de San Antonio, Ron Nirenberg, calificó el hallazgo como “una terrible tragedia”, y junto a otras autoridades, declaró en una conferencia de prensa que no recordaba un incidente como este.
William McManus, el jefe de policía de San Antonio, indicó durante la mañana de este martes que los policías recorrerán las zonas aledañas a la ubicación del tráiler para tratar de ubicar más heridos o cuerpos de inmigrantes que lograron escapar, pero que hayan cedido al calor.
De otro lado, indicó que la investigación ha quedado en manos federales, por lo que el siguiente paso será tratar de ubicar a las organizaciones de tráfico de personas. Por lo pronto, ya se logró capturar a tres personas.
El secretario de Seguridad Interior de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, calificó a los traficantes como seres monstruosos y señaló que “trabajaremos para que los responsables de esta tragedia sean llevados ante la ley y continuaremos nuestro trabajo para desmantelar las redes de trata de personas”.
Según cifras consultadas por el medio, mayo rompió los registros de cruces ilegales al país con más de 239.000 entradas. Esto se debe a la frontera que comparten México y el estado de Texas, donde cruzan cientos de ciudadanos centroamericanos y mexicanos al país.
El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, politizó el tema y culpó directamente a la administración del presidente Joe Biden, señalando en Twitter que “estos muertos son de Biden”.
“Son el resultado de su política mortal de fronteras abiertas”, añadió Abbottm quien busca la reelección en su cargo en los comicios de noviembre.
Por su parte, el comisionado a cargo de la frontera, Chris Magnus, había alertado anteriormente sobre el peligro que representa cruzar la frontera en este momento del año.
“El territorio es extremo, la ola de calor del verano es severa y los kilómetros de desierto que los migrantes deben cruzar tras pasar la frontera no perdonan. Nuestro mensaje a quienes quieren intentar entrar de manera ilegal a Estados Unidos es el mismo: no hagan un camino peligroso solo para ser enviados de vuelta”, afirmó el funcionario en un comunicado.
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