Insólito. Una discusión en la cola de un supermercado de la localidad bonaerense de Quilmes, en Argentina, casi termina en tragedia luego de que uno de los protagonistas resultó herido de cinco disparos la mañana del domingo.
Según testigos, Roberto Cavana (57) y el presunto agresor, identificado como José María Scrocchi (72), intercambiaron palabras de forma acalorada hasta que este último lo amenazó con que lo iba a “agarrar afuera”.
Cuando Cavana se retiraba fue abordado por Scrocchi que, sosteniendo un arma de fuego, le disparó cinco veces. Tras lo ocurrido, la Policía se acercó al lugar y halló a la víctima tendida en el suelo, junto a un revólver de calibre .38 y un cuchillo, informó la agencia Télam.
Cavana fue trasladado de emergencia en una ambulancia del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME) al Hospital Iriarte de Quilmes, donde ingresó “lúcido” mientras las fuerzas del orden detuvieron al sindicado como el autor de la agresión.
Este lunes, Gustavo Trimarchi, abogado del supuesto agresor, reveló que, según lo que contó la cajera del local a las autoridades, la víctima quería pasar cuando era el turno de su defendido.
En ese sentido, el letrado precisó que al adelantarse, la víctima se burló del hombre y, en “tono socarrón”, le dijo que “se había olvidado de efectuar una compra de toallitas femeninas”, lo que inició la “discusión verbal”.
“El arma, en principio, podría ser de él. Esa es la hipótesis que maneja la Fiscalía”, precisó el abogado pero –según dijo– “el cuchillo que se encontró en el lugar, en principio, no seria de mi defendido”.
En declaraciones al canal Todo Noticias de Argentina, el defensor legal de Scrocchi insistió en que su representado es un adulto mayor que “no se encuentra en tiempo y en espacio” y que actualmente está “completamente desorientado”.
El abogado también denunció que su cliente no está recibiendo alimentación en el calabozo y apuntó que se trata de una persona insulino-dependiente, con antecedentes cardíacos y “otro tipo de problemas inclusive de tipo psiquiátrico” contra los que, dijo, habría dejado de tomar la medicación.
En tanto, la Fiscalía de Argentina catalogó el caso este domingo como “tentativa de homicidio y portación ilegal de arma de fuego”, tras lo que se ordenó un allanamiento en el hogar del supuesto atacante, en el que hallaron mas armas, proyectiles y una granada.
Trimarchi aseguró hoy que todo el armamento que se encontró tiene una procedencia conocida y que la granada no tenía dispositivo de acción y es de hace 35 años, por lo que se trata de “un adorno”, agregó.
También apuntó que la Fiscalía encontró permisos de armas de 1985 que estaban vencidos y afirmó que, en cuanto al revolver con el que se dispararon los cinco tiros, “no existe documentación alguna que lo vincule”. (Con información de EFE y Telám)
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