En fin de año, entre la compra de regalos, la cena de Navidad, las fiestas de promoción e incluso la planificación de un viaje para disfrutar el verano con los hijos, ¡no hay presupuesto que aguante!.
A menos que hayas previsto estos gastos con anticipación y dispongas del dinero suficiente, Carlos Infante, especialista de Finanzas de Certus, te aconseja no afrontar cada compra con las tarjetas de crédito ni mucho menos retires efectivo de ellas, ya que las tasas de intereses son mayores. Mejor, evalúa si es necesario pedir un préstamo personal.
A HACER NÚMEROS
Antes de solicitarlo, Infante te sugiere analizar tu capacidad de pago de manera realista. ¿Cómo? Elabora tu presupuesto mensual. Suma todos tus gastos fijos del mes (alimentación, servicios básicos, alquiler de vivienda y pasajes).
Compara ese total de gastos con tu sueldo o ingreso y anota el dinero extra que te queda. A continuación, revisa los compromisos que tienes que asumir próximamente y, si el dinero excedente del ejercicio anterior no te alcanza para cubrirlos, define el monto exacto que necesitas, y en caso de recibirlo como préstamo, piensa en cuántos meses podrías pagarlo.
“La cuota no puede exceder el 35 % de tu ingreso mensual, de lo contrario estarás agobiado en caso de que surja una emergencia en el hogar”.
TASA DE INTERÉS
Es fundamental que tengas en cuenta que la tasa de interés de un préstamo varía de acuerdo a la entidad financiera y tu perfil crediticio. Si has demostrado tener un buen comportamiento de pago, entonces el banco te cobrará una tasa menor.
+DATOS
No pidas más dinero del que necesitas. Por el contrario, ajusta al máximo la cantidad que quieres solicitar y evitarás pagar más intereses por él.
Sabías que...
Por sus tasas de intereses, conviene pedir el préstamo personal a un banco. Las cajas municipales y regionales ayudan más cuando se quiere depositar dinero y recibir rentabilidad por ello.