El verano empezó con fuerza y si buscas refrescarte, una deliciosa cremolada de frutas es tu mejor opción. Su preparación es sencilla y económica, pues básicamente es un jugo congelado que luego será batido en la licuadora. Entonces, los insumos serán las frutas, agua y azúcar.
De preferencia prepara las cremoladas con frutas de estación. A continuación te damos cuatro recetas. No esperes más, alista tus ingredientes y utensilios y ¡refresca tu verano!
CREMOLADA DE PIÑA
Ingredientes:
- 1/3 taza con azúcar.
- 1 kg. piña Golden en trozos.
Preparación:
En una olla coloca el azúcar con un cuarto de taza de agua. Mueve constantemente hasta que hierva. Agrega la piña y deja cocinar cinco minutos más. Retira del fuego y deja enfriar. Licúa la preparación, cuélala y métela en la refrigeradora una hora.
Pasado el tiempo, vierte la mezcla en un recipiente y llévala a la congeladora durante cinco horas. Luego retira del frío y vuelve a licuarla. Listo, es hora de servir.
CREMOLADA DE MANGO
Ingredientes:
-1 kg. de mango.
-2 cucharadas de azúcar blanca.
- 2 tazas con agua
Preparación:
Pela los mangos, córtalos en trozos y licúalos con el agua y el azúcar hasta que quede una mezcla uniforme. Debe quedar como puré, no como jugo. Viértelo en un recipiente y mételo en la congeladora toda la noche. Al día siguiente, licúa la cremolada otra vez (le darás más cremosidad) y sirve.
CREMOLADA DE NARANJA
Ingredientes:
-3 tazas con jugo de naranja.
-55 g azúcar rubia.
-2 cdas. de leche fresca.
-1/2 cdta. de esencia de vainilla.
-1/2 taza con agua.
Preparación:
Mezcla en un bol el jugo de naranja, el azúcar, la leche, la esencia de vainilla y el agua hasta combinar todos los ingredientes. Luego, vierte la preparación en un recipiente y colócala en el congelador durante cuatro horas o hasta que quede compacta. Retira y licúala hasta obtener una consistencia granulada. Finalmente sirve en vasos.
CREMOLADA DE FRESA CON LECHE
Ingredientes:
-1 kilo de fresas
-1/2 taza con azúcar blanca.
-Aproximadamente media lata de leche evaporada (sin agua).
Preparación:
Limpia las fresas y licúalas junto al azúcar y la leche hasta que quede una mezcla uniforme. Tal cual como hicimos con las cremoladas anteriores, coloca la preparación en un recipiente y llévala a la congeladora toda una noche. Al día siguiente, vuelve a licuarla y sirve.
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