La endometriosis es una patología que está teniendo mayor protagonismo en los últimos años. En la actualidad, hay más mujeres que se quejan por fuertes dolores en el vientre antes de que llegue su menstruación o alrededor de este ciclo. Esta es una enfermedad inflamatoria y puede afectar a otros órganos del cuerpo. No existe cura, pero es necesario que la paciente tenga un buen diagnóstico para tener un tratamiento adecuado.
Conversamos con Andrea Ruiz, presidenta de la Asociación de Pacientes con Endometriosis y Adenomiosis del Perú, quien nos comentó la real situación de viven muchas mujeres que padecen esta enfermedad, y de la cual se habla muy poco.
Ruiz dice que los ginecólogos no tienen la capacitación adecuada sobre la enfermedad y cuando llega una paciente que presenta un dolor durante o alrededor del período lo ven como un síntoma normal, como si se fuera una dismenorrea o tiene un problema ginecológico; cuando en realidad es una patología separada, sistémica.
Ruiz señala dice que existen varias teorías sobre la causa de la endometriosis. Al inicio se decía que se daba en mujeres que tenían la menstruación retrógrada (incapacidad de eliminar por completo todo el tejido endometrial a través del sangrado vaginal), pero no es del todo cierto, porque el 90% de las mujeres tienen la regla retrógrada; entonces, ¿por qué solo el 10% de las mujeres desarrollan endometriosis?
Otros estudios dicen que es un tema genético, pues aquellos pacientes que tienen a un familiar de primer grado con endometriosis, las probabilidades de tenerlo es de 7 a 10 veces más. Y según, las investigaciones, esta patología viene de fábrica; es decir, desde que se forma el embrión hay células implantadas en el cuerpo, y una vez, que comienza a generar mayor cantidad de estrógenos, esta enfermedad se activa y comienza a hacerse visible y a desarrollarse en diferentes partes del cuerpo.
La endometriosis es una enfermedad inflamatoria, es crónica, progresiva y no tiene cura. Afecta de manera sistémica al cuerpo (afecta a otros órganos).
“Existe una gran preocupación, pues mientras más se demora el diagnóstico, la paciente pueda presentar mayores síntomas con los años y que haya una afectación de otros órganos. Y esto se debe, porque hay un tejido similar al endometrio que crece en otras zonas de la pelvis, generando una reacción en cadena en todo nuestro organismo”, explica.
Las mujeres empiezan con dolores incapacitantes durante la menstruación, que muchas veces vienen acompañados con dolor lumbar, otras tienen diarreas en el período o presentan estreñimiento antes de que venga el ciclo menstrual; dolores gastrointestinales que se manifiestan cuando van al baño, síntomas de tipo urinario. Muchas de las chicas presentan migrañas, adormecimiento de la parte baja del cuerpo, dolor con las relaciones sexuales y sangrado abundante.
“Algunas piensan que tienen infección, pero esto es proceso de la inflamación de la enfermedad que afecta la vejiga, la uretra o los riñones”, detalla.
Se necesita de un tratamiento multidisciplinario. Lo primero es que tengan un diagnóstico, que el médico pueda escuchar tu sintomatología, cuándo sucede, cuánto es la intensidad, cuánto te dura, si cede con algún medicamento o cambio de hábito.
“Es importante tener un correcto diagnóstico de imágenes para saber qué órganos está afectando, qué grado de endometriosis es, y así saber qué tratamiento seguir según sea el caso”, refiere.
Ruiz cuenta que hay pacientes que pueden tener endometriosis y que pueden manejar muy bien sus síntomas con terapia hormonal, pero hay casos en que tienen afectación con otros órganos y necesitan acompañamiento integral, pasar por nutricionista, por un gastroenterólogo, un urólogo y así sucesivamente. .
“El tratamiento no es solo ginecológico con hormonas, sino que va acompañado con nutrición, con actividad física, una buena higiene de sueño, un buen manejo de estrés, pues lamentablemente, la endometriosis al ser una enfermedad sistémica disminuye mucho la respuesta del sistema inmune y hace que la paciente esté propensa a poder empezar a tener otras patologías como: fibromialgia, tiroides, hipertiroidismo, síndrome del ovario poliquístico, reflujos... todo va en cadena”, detalla.
La paciente al tener estos síntomas de dolor que no ceden con medicamentos, influye en su salud mental y emocional.
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