Las papas fritas son uno de los peores enemigos de la alimentación saludable. Sin embargo, muy pocos se pueden resistir a su delicioso y crocante sabor, sobre todo en el Perú, el país de la salchipapa.
Al margen de que sea uno de los alimentos predilectos de los peruanos, especialmente de los amantes de la comida chatarra, un estudio reciente acaba de descubrir que su consumo frecuente podría aumentar el riesgo de muerte. ¡Mucho cuidado!
Una investigación publicada en la revista American Journal of Clinical Nutrition tomó una muestra de 4400 personas, todas ellas entre los 45 y 79 años. Los especialistas observaron su consumo de papas, tanto fritas como cocidas, a lo largo de ocho años y al acabar el estudio, descubrieron que 236 habían fallecido.
Los investigadores llegaron a la conclusión que quienes comían papas fritas dos o tres veces a la semana y los que las consumían más de tres veces semanales sufrieron de un aumento en el riesgo de mortalidad. En contraposición, aquellos que las comían sin freír no corrieron el mismo peligro.
‘El consumo frecuente de papas fritas parece estar asociado con un mayor riesgo de mortalidad. Se deben realizar estudios adicionales con muestras más grandes para confirmar si el consumo general de papa está asociado con un mayor riesgo de mortalidad’, concluyó la investigación.
Cabe indicar que comer papas horneadas o hervidas es muy beneficioso para la salud. Estos tubérculos tienen gran contenido de fibra, vitaminas y micronutrientes, propiedades que se pierden al freírlas.
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