El parkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente entre los adultos mayores, pero las causas que lo originan aún son un misterio.
La neuróloga Marla Gallo señala que este mal se manifiesta cuando las neuronas no producen la suficiente cantidad de dopamina, neurotransmisor encargado de coordinar los movimientos musculares.
El mal de Parkinson no es hereditaria y no existe un examen que ayude a prevenirla. A pesar de las investigaciones, recién se puede diagnosticar cuando se encuentra en el tercer estado, es decir, cuando los síntomas son muy notorios.
SÍNTOMAS
Temblor en las manos, brazos, piernas y en la mandíbula.
Rigidez y falta de expresión facial.
Problemas de equilibrio y coordinación, y alteraciones en la postura.
Lentitud en los movimientos.
RECOMENDACIONES
Las personas con parkinson -aconseja la especialista- deben llevar una alimentación balanceada, practicar ejercicios de manera regular para fortalecer su corazón y reducir las alteraciones de sueño, y recibir el apoyo de sus familiares (para evitar los cuadros de tristeza y melancolía). En casos severos (cuando los temblores corporales son intensos, por ejemplo), se recomienda una cirugía para mejorar su calidad de vida.
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