En algún momento te has preguntado: ¿Estoy con mi pareja por amor o costumbre? ¿Cómo me siento con la relación? ¿Soy feliz? ¿Estoy agobiada? ¿Tengo miedo de quedarme sola? ¿Aún vive la pasión, deseo y atracción entre nosotros? Si lo has hecho significa que hay algo que no está funcionando bien con tu pareja y debes solucionarlo lo antes posible.
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Carmen Bravo de Rueda, psicóloga y psicoterapeuta de la Clínica Ricardo Palma, señala que si bien en la etapa del enamoramiento todo es felicidad, es normal que conforme pasen los meses y años la efusividad disminuya. No por eso se debe pensar que ya no hay amor. Antes de tomar una decisión, siéntate con tu galán y conversen. Dile qué te está afectando, puede que él también esté sintiendo lo mismo pero no se atreve a decírtelo. Además, plantéense metas juntos para que ambos se esfuercen en conseguirlas; eso, aunque no lo crean, ayuda a reforzar la relación.
UN PROCESO. Si sientes que aún amas a tu pareja, entonces lucha por salvar tu relación. Por ejemplo, si desde hace tiempo no sorprendes a tu chico con un detalle (una cena romántica, un mensaje cariñoso a media mañana, un regalito, una caricia), es momento de hacerlo. La idea es reavivar la llama de la pasión entre ustedes. Seguro que él también pondrá de su parte y buscará impresionarte.
ANALIZA BIEN. “Si no estás contenta con tu relación y todo el tiempo peleas con tu pareja y sufres, debes sincerarte contigo misma y preguntarte si deberías seguir con él”, aconseja la especialista. Si te entercas en permanecer a su lado, -agrega- solo te harás daño. Pon las cartas sobre la mesa y toma una decisión. No será fácil, pero es necesario.
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Recuerda que cuando hay amor no vas a intentar dominar, manipular o juzgar a tu pareja. Al contrario, le vas a pedir su opinión porque te interesa saber lo que piensa y siente. Además, querrás compartir experiencias con él y cuando surjan problemas buscarás solucionarlos porque sabes que nadie es perfecto y todos podemos equivocarnos.