Con el inicio de clases, vuelven a la palestra muchos temas que preocupan a los padres de familia. Uno de ellos es, sin duda alguna, el acoso escolar o bullying. Este tipo de hostigamiento y maltrato psicológico y físico todavía sigue siendo muy frecuente en los colegios. Por ello, es clave conocer las señales que suelen presentar las víctimas de bullying, para así actuar rápidamente y proteger a los pequeños del hogar.
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“Muchos papás dicen ‘mi hijo es tímido, por eso no me di cuenta de que sufría bullying’, pero es falso, siempre hay indicadores que deberían alertarte. Ante el mínimo cambio de comportamiento, ‘activa tu chip’ y observa todo lo que sucede después. Recuerda que los padres deberían ser el lugar seguro de los hijos. Dales confianza desde pequeños para que más adelante hablen libremente de todo”, explica el psicólogo Ítalo Arrúe.
Él enumera siete conductas muy comunes en chicos víctimas de bullying:
1. Tendrá arranques de ira, llanto, mal humor, tristeza, por cosas mínimas y sin razón aparente. Puede haber cambios drásticos como empezar a comerse las uñas y orinarse en la cama.
2. Se pone nervioso cuando tiene que ir al colegio, inventará cualquier excusa para no ir.
3. Pierde útiles o prendas de vestir y no logra explicar qué sucedió.
4. Presentará problemas para dormir, tendrá pesadillas y probablemente quiera dormir acompañado.
5. Si era buen alumno, de un momento a otro bajan sus calificaciones y no se preocupa por mejorar.
6. No lo invitan a fiestas y él tampoco quiere invitar a sus compañeros a casa.
7. No quiere que vayas a los eventos del colegio, ya sean actuaciones o reuniones con los profesores; mucho menos querrá que lo dejes o recojas del colegio.
Los niños y adolescentes víctimas de bullying también pueden presentar desórdenes en su alimentación, problemas digestivos, mareos, vómitos, palpitaciones y dolores de cabeza.
Tendrá arranques de ira y llanto sin razón alguna. Empezará a aislarse, comerse las uñas y puede tener problemas para dormir.
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