En Brasil, Universitario perdió 3 puntos y también la libertad. La crema masticaba su dolor por la derrota ante Corinthians y de pronto sucedió algo peor. La delegación abandonaba el ‘Neo Química Arena’ y un contingente policial detuvo al preparador físico Sebastián Avellino.
La razón era que había soltado insultos racistas contra los torcedores del ‘Timao’ y por eso la intervención. Según el grupo denunciante, los habría llamado ‘monos’, pero ninguno mostró video u otra prueba contundente para justificar la orden de arresto.
Luego de ser trasladado a la dependencia, tuvo que pasar la noche en un calabozo, para esperar un día después que un juez dictamine su situación legal. Luego fue llevado al Juzgado Especial Criminal (JECRIM) de Itaquera, en Sao Paulo, para brindar testimonio.
El magistrado determinó prisión preventiva para el profesional ‘charrúa’ y de inmediato abogados brasileños, que representan al club peruano, apelaron el fallo. Se deduce que en las próximas horas siga el proceso en libertad.
Contenido GEC