Se pone a chambear. Paolo Guerrero abordó el primer vuelo del Jueves Santo rumbo a Trujillo y lo hizo con toda su familia, Ana Paula Consorte, sus tres hijos y donde la gran ausente fue, nada menos, que Doña Peta. El goleador busca no perderse uno de los partidos mas importantes desde su llegada al cuadro ‘Poeta’.
El ‘Depredador’ había recibido un permiso especial de ‘Chicho’ Salas, nuevo entrenador de César Vallejo, para celebrar el cumpleaños de su hijo en Lima y el jueves ser parte del partido de práctica de cara al duelo con Universitario de Deportes .
También resaltó la alegría que ha recuperado la selección tras estos dos amistosos. “Ha sido una gran experiencia con el profe, creo que los muchachos están muy contentos, así que ahora solo nos queda seguir trabajando cada uno en sus clubes”, dijo el ‘Depredador’.
El ‘Depredador’ ahora se pone las pilas para meterse en el once de César Vallejo para el duelo del sábado ante Universitario el cual considera como un ‘clásico’. “Ahora estamos volviendo a Trujillo para trabajar, descansar y hacer todo lo mejor para que el equipo mejore en la tabla”, dijo el goleador.
Por la mañana, Paolo Guerrero formó parte de la práctica organizada por Guillermo Salas en la ‘Villa Vallejiana’ y se confirmó que el jugador no regresó con ninguna lesión que le impida estar este sábado en el Estadio Mansiche.
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