El gobierno de Etiopía se pronunció sobre la denuncia del maratonista Feyisa Lilesa, quien aseguró que si volvía a su país podían matarlo debido a su origen étnico Oromo, tras ganar la medalla de plata en los Juegos Olímpicos Río 2016.
Al respecto, un funcionario del estado de Etiopía aseguró que “a pesar de que está prohibido expresar una postura política en los Juegos Olímpicos, el atleta tendrá una bienvenida junto los otros miembros del equipo olímpico de Etiopía. No tendrá ningún problema”, declaró Getachew Reda, portavoz oficial del estado.
Feyisa Lilesa hizo pública la dura realidad que sufren los oromos en Etiopía. Denunció la dura represión con un gesto que dio la vuelta al mundo: las manos esposadas. Por este acto el atleta dijo que temía por su videa. “Si vuelvo, sé que podrían encarcelarme o incluso matarme, es algo que ya he discutido con mi familia. Pero yo represento a mi pueblo y creo que debo dar a conocer lo que nos pasa”.
Feyisa Lilesa won a silver medal in the Olympics
. His bravery in protest is extraordinary: pic.twitter.com/sxCZunb052— Alex Howard (digiphile) 21 de agosto de 2016
“Fue una protesta, porque soy oromo, y en Etiopía los oromo somos reprimidos por el Gobierno. Nos matan y nos encarcelan, somos sospechosos por el simple hecho de ser oromo. Tengo parientes presos y llevaré la protesta de mi gente allí adonde vaya. Todavía no tengo decidido si voy a volver a Etiopía o quedarme en otro país”, denunció Feyisa Lilesa.
“En Etiopía hay 15 millones de oromos y el Gobierno nos obliga a dejar nuestras tierras, nos encarcela, nos mata. Yo les pido que ustedes, los periodistas, que hablen de la democracia que no existe en mi país, y de los intereses económicos que apoyan la represión de los Oromo”, finalizó Feyisa Lilesa.
Más noticias…
Si te interesó lo que acabas de leer, puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter, y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter