Hace unas semanas, el posible hallazgo de restos de extraterrestres en un desierto entre Nazca y Palpa comenzó a circular en diversas páginas de esoterismo y paranormal y generó gran conmoción de los pobladores de Ica. Ante del rumor de esta noticia, el Ministerio de Cultura incluso se vio obligado a realizar investigaciones en la zona.
Un sujeto, que se identificó con el pseudónimo de ‘Krawix’, contó a Trome que compró una parte de las piezas a un huaquero de Nazca, quien las descubrió en el 2014 dentro de un conjunto de cámaras subterráneas enterradas en arcilla. En su poder tiene cráneos abultados con nariz y labios delgados y hasta cuerpos de 23 centímetros de color gris que tienen tres dedos en las manos y pies.
Luego de realizar estudios con arqueólogos forenses, doctores y otros especialistas, comprobó que estos restos fueron manipulados y armados posiblemente por culturas antiguas o incluso incas. “No se sabe por qué lo armaron utilizando huesos de animales y humanos antiguos”, dijo.
Con un análisis de espectroscopia, también se constató que estos seres tenían en la piel proteínas, carbohidratos y una sustancia que fue utilizada para la momificación. “Es la primera vez que en el Perú se encuentra estas formas humanoides. Mi objetivo es demostrar quiénes lo han hecho, tal vez tuvieron contacto con alienígenas”, agregó.
Al respecto, Johny Isla, responsable del Sistema de Gestión del Patrimonio Cultural en Nazca y Palpa, aseguró que un grupo de arqueólogos realizaron investigaciones y búsquedas cerca de diez días en la zona. Sin embargo, no se encontró nada, por lo que no se puede dar fe del hallazgo.
Para certificar, comentó que se deben hacer varias pruebas, como de Carbono 14. “Deberían decirnos el lugar exacto en donde lo encontraron para poder estudiarlos, pues solo nos enviaron fotos de los restos. Se habla hasta de que hay alienígenas, pero en concreto no hay nada verídico”, finalizó.