Desesperada se encuentran la madre del ingeniero Jheferson Hilario Arteaga que trabajaba para una contratista que le brinda servicios a la empresa Poderosa, en Pataz (La Libertad), pero desde hace cinco meses no tiene noticias de su vástago.
“Yo converso con él, le pregunto qué es lo que pasó. Me dice mamá ayúdame”, relata Rocío Arteaga, madre del joven ingeniero que prestaba servicios a la mina Poderosa, donde el sábado último nueve trabajadores fueron asesinados y otros 17 resultaron heridos.
La progenitora del ingeniero de minas señala que desde que denunció la desaparición de su hijo ha recibido varias versiones. Le dijeron que salió del trabajo con días de anticipación, pero otros indican que estuvo en un bar. Lo cierto es que nunca más lo volvió a ver y con resignación espera, aunque sea velar sus restos.
Por otro lado, señaló que teme que su hijo haya sido secuestrado y asesinado tal y como ocurrió en la masacre de Pataz perpetrada por bandas que intentan tomar el control de la zona minera a base de la violencia y el terror.
“Hemos ido a Pataz y hemos seguido a buscarlo. La gente nos dice que el no salió que todo sucedió en la mina. Con eso que acaba de suceder (masacre con 9 muertos) nosotros creemos que a mi hijo le sucedió lo mismo”, sostuvo su afligida madre.
Lo lamentable es que la investigación para ubicarlo está paralizada, pero ella continuará hasta que sea ubicado con vida o fallecido. Por ahora, todas las noches se encierra habitación de su hijo para pedir por su bienestar.
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