Una segunda toma de Lima fue anunciada para este miércoles 1 de marzo por grupos opositores al gobierno de la presidenta de Dina Boluarte que exigen el adelanto de las elecciones el cierre del Congreso y la instalación de una Asamblea Constituyente.
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Las circunstancias en que se llevarían a cabo las nuevas protestas son diferentes a las que ocurrieron en enero y febrero en la capital, cuando se anunció la primera toma de Lima y en la que algunos grupos de manifestantes llegaron incluso a San Isidro y Miraflores.
Aquellas protestas ocurrieron mientras las carreteras del norte, centro y sur del país estaban bloqueadas por un gran número de piquetes. Además, las movilizaciones también se efectuaban en el interior del país, sobre todo en las regiones del sur. Hoy el tránsito se ha regularizado, con excepción del sur, y las protestas disminuyeron.
Además de eso, en Lima se adoptaron medidas que imposibilitarían las manifestaciones que acarreen peligro tanto para los ciudadanos como para los negocios instalados en el Centro de Lima y su patrimonio histórico y cultural.
A mediados de febrero, la Municipalidad de Lima declaró al Centro Histórico de la capital como zona intangible para el desarrollo de marchas, manifestaciones y concentraciones públicas y políticas que “pongan en riesgo la seguridad y/o salud pública”.
La decisión del concejo fue adoptada ante los destrozos cometidos por manifestantes durante las protestas contra el gobierno central, así como los ataques conta agentes de la Policía Nacional y el perjuicio causado a los comerciantes del Cercado de Lima.
La nueva zona intangible de Lima incluye el Paseo de los Héroes Navales, el Parque de la Exposición, la Plaza Bolognesi, la Plaza Dos de Mayo, Caquetá, las avenidas Tacna, Abancay, Miguel Grau, y por supuesto, la Plaza de Armas y la Plaza San Martín.
La Plaza Dos de Mayo era en punto de concentración donde iniciaron la mayoría de las marchas que se desarrollan en Lima desde inicios de año, afectando además el libre tránsito de vehículos. . Puede ver el detalle a continuación en este enlace.
De hecho, este miércoles agentes de la Policía Nacional ya están instalados en varios lugares estratégicos del centro de la ciudad ara resguardar la tranquilidad.
Al ser consultado sobre las nuevas protestas previstas para este miércoles, el presidente del Consejo de Ministro, Alberto Otárola, aseguró que “no habrá ninguna toma de Lima” e indicó que la Policía Nacional impondrá el orden en la ciudad
“La policía actuará respetando los derechos humanos y las libertades de los ciudadanos”, aseguró a la prensa.
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