NUEVA IMAGEN. En medio del estado de emergencia decretado en algunas zonas del Perú, como los distritos limeños de San Juan de Lurigancho y San Martín de Porres, la Policía ha implementado un cambio en su política de detención de delincuentes, utilizando uniformes de color rojo, grilletes y carteles según su delito para identificar a aquellos que han sido capturados en flagrancia. Esta medida busca evitar posibles intentos de rescate o fugas por parte de los detenidos.
El general Jorge Angulo, comandante general de la PNP, explicó que esta nueva estrategia se basa en estándares internacionales y tiene como objetivo distinguir rápidamente a los delincuentes privados de su libertad. Además del color rojo, también se utilizará otros colores para identificar diferentes tipos de delitos.
“Nosotros tenemos referencias internacionales para distinguir a las personas cuando están privadas de su libertad. Los capturados han sido detenidos en flagrancia y con granadas en la mano. No quisiéramos que intenten fugar o que alguien los quiera rescatar, por eso el color (rojo) para que sean fáciles de identificar”, explicó Angulo a América TV.
El aumento de la extorsión en un 50 % ha sido uno de los principales motivos para implementar esta medida. Los grilletes no solo se colocan en las manos de los detenidos, sino también en sus tobillos, para evitar cualquier posibilidad de fuga o intento de evasión.
“No habrá ningún tipo de probabilidad para que estos tipos puedan evadir a la justicia. Por eso no solo tienen grilletes en las muñecas, sino también en los tobillos”, precisó el comandante general de la PNP.
Esta nueva medida forma parte del Plan Boluarte, un plan integral de seguridad ciudadana implementado por la Policía Nacional del Perú.
Tras sendos operativos en San Juan de Lurigancho y San Martín de Porres, el general Angulo informó que se desarticularon seis bandas criminales, se confiscaron cinco armas de fuego, 50 sujetos fueron intervenidos y se detuvo a un menor de edad de nacionalidad venezolana, quien poseía una granada de guerra, la cual era de las mismas características de la que explotó en la discoteca Xanders, el pasado viernes 17.
“El que controla el territorio, controla el delito. Mientras más presencia tengamos en la vía pública, podremos disminuir la probabilidad de un hecho criminal. Eso está demostrado. Un 1% de presencia policial disminuye en 0.52% la probabilidad de un ataque criminal a un ciudadano en la calle. La presencia territorial policial disminuye los hechos delictivos”, indicó.
En tanto, el general Óscar Arriola, jefe de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (Dirincri), comunicó en una entrevista para Canal N que también se atraparon a dos colombianos que operarían bajo la modalidad del gota a gota. También se les encontró una granada de guerra tipo piña, además de un revólver.
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