Puede pasarle a cualquiera. El cansancio no es ajeno a nadie, y mucho menos al papa Francisco, quien tiene una agenda muy cargada, por lo que se acuesta alrededor de las 9 de la noche y se levanta a las 4 de la madrugada.
Luego ora y en la tarde suele tomarse una corta siesta después del almuerzo, de acuerdo con fuentes del Vaticano.
Lo cierto es que, durante una entrevista por la televisión católica italiana, el papa Francisco reconoció que a veces se queda dormido mientras reza. Así como lo lees.
El papa Francisco explicó que caer en los brazos de Morfeo le ha impedido en algunas oportunidades "santificar el nombre de Dios".
"Yo también, cuando oro, a veces me quedo dormido", confesó sonriendo el pontífice argentino a TV2000.
El descanso y el sueño, si se ofrecen a Dios, se convierten en oración, según dice la Biblia y confirman los santos, explicaron fuentes religiosas.
"Santa Teresa del Niño Jesús también lo decía y sostenía que le agradaba mucho a Dios", explicó el papa, tras citar uno de los numerosos salmos en los que se habla de los sueños, se revelan profecías y se pide al creyente que "se abandone a Dios como un niño en brazos del padre", dijo.
"Esa es una de las muchas maneras de santificar el nombre de Dios, sentirse niño en sus brazos", aseguró Francisco, quien llegará a Lima el próximo 18 de enero de 2018.
El papa argentino, de 80 años, suele aparecer lleno de energía cuando encara multitudes, pero su rostro se transforma completamente cuando reza, se vuelve serio y circunspecto o cierra los ojos por largos momentos.
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