El presunto cabecilla de la organización criminal “Los Injertos de Huarmey”, Pablo Martín Mendoza Chávez, alias “Cheto”, fue hallado sin vida en su celda del penal de Cambio Puente de Chimbote.
El recluso cumplía una orden de 36 meses de prisión preventiva por una investigación por tráfico de terrenos, extorsión y otros delitos junto a otras 19 personas, incluida la entonces fiscal Beatriz Gómez Carranza.
“Cheto” fue hallado a las 07:00 horas del martes por sus compañeros del penal, quienes comunicaron el deceso a los agentes del Inpe.
El presunto cabecilla y otros 14 implicados en la organización criminal “Los Injertos de Huarmey” fueron detenidos el 20 de abril del año pasado en un megaoperativo simultáneo desarrollado en Huarmey, Chimbote y Lima.
Hasta cinco testigos con código de reserva han aseverado que “Cheto”, bajo la fachada de dirigente vecinal, habría usurpado terrenos en la provincia de Huarmey.
Además, la Fiscalía, a través de escuchas legales, recogió conversaciones entre el cabecilla y sus subalternos que lo compromete en una serie de delitos con el único objetivo de lucrarse económicamente.