Para ‘defender’ a su esposo, que iba a ser sancionado por cometer una infracción de tránsito, una enfurecida empresaria no solo rompió el uniforme y arañó el brazo a una mujer policía, sino que le arrojó encima el vaso de cremolada que estaba consumiendo en Moquegua.
Se trata de Erika Milagros Paredes Vargas (38), quien la tarde del sábado agredió a la suboficial de la PNP María Fernanda Carrillo Flores, de la Unidad de la Policía de Tránsito, quien junto a su colega, la suboficial PNP Mirely Ramos Huaralla, intervino al esposo de la empresaria, identificado como Carlos Kihier Perea, por estacionar su camioneta Z1L-486 sobre la vereda de la calle Moquegua, frente a la municipalidad provincial de Mariscal Nieto.
Cuando la suboficial María Carrillo intentaba anotar los datos de Carlos Kihier en la papeleta de infracciones, Erika Paredes reclamó airadamente que era injusta la sanción y de un momento a otro arrebató a la agente policial los documentos de su esposo, causándole la lesión en el brazo derecho, además de romperle el uniforme y ensuciarla con la cremolada.
“Crees que porque tienes chaleco mereces respeto, aprende a respetar a los ciudadanos. Estudia aunque sea un año”, le gritó la envalentonada empresaria desde la cabina de su camioneta a la suboficial, escudándose en que su menor hijo atravesaba por una crisis nerviosa desatada por la intervención de las policías en Moquegua.
Erika Paredes enfrenta una denuncia por el delito de violencia y resistencia a la autoridad y ayer fue puesta a disposición de la Fiscalía de turno y podría ir a la cárcel.
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Para ‘defender’ a su esposo, que iba a ser sancionado por cometer una infracción de tránsito, una enfurecida empresaria no solo rompió el uniforme y arañó el brazo a una mujer policía, sino que le arrojó encima el vaso de cremolada que estaba consumiendo en Moquegua.
Se trata de Erika Milagros Paredes Vargas (38), quien la tarde del sábado agredió a la suboficial de la PNP María Fernanda Carrillo Flores, de la Unidad de la Policía de Tránsito, quien junto a su colega, la suboficial PNP Mirely Ramos Huaralla, intervino al esposo de la empresaria, identificado como Carlos Kihier Perea, por estacionar su camioneta Z1L-486 sobre la vereda de la calle Moquegua, frente a la municipalidad provincial de Mariscal Nieto.
Cuando la suboficial María Carrillo intentaba anotar los datos de Carlos Kihier en la papeleta de infracciones, Erika Paredes reclamó airadamente que era injusta la sanción y de un momento a otro arrebató a la agente policial los documentos de su esposo, causándole la lesión en el brazo derecho, además de romperle el uniforme y ensuciarla con la cremolada.
“Crees que porque tienes chaleco mereces respeto, aprende a respetar a los ciudadanos. Estudia aunque sea un año”, le gritó la envalentonada empresaria desde la cabina de su camioneta a la suboficial, escudándose en que su menor hijo atravesaba por una crisis nerviosa desatada por la intervención de las policías en Moquegua.
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